El ex socialista Damborenea pide el voto para el PP durante un mitin de Aznar
Eran casi las nueve de la tarde cuando Ricardo Garc¨ªa Damborenea durante a?os l¨ªder del PSOE de Vizcaya, sub¨ªa a la tribuna. El escenario: la plaza de toros de Zaragoza. El p¨²blico: 10.000 personas que acababan de aclamar a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar ("presidente, presidente") Damborenea prob¨® el sonido y empez¨®: "Vengo a dar mi opini¨®n sobre lo que conviene a Espa?a y a los espa?oles: que gane las elecciones el PP. Y a anunciar que voy a votar al PP. As¨ª de claro".
El p¨²blico, al principio desconcertado, convirti¨® el discurso de 25 minutos en un dif¨ªcil recorrido verbal entre ovaci¨®n y ovaci¨®n. Fue un dur¨ªsimo alegato contra sus ex compa?eros del PSOE y un canto a Aznar, al que introdujo en la Historia por haber conseguido "f¨®rjar una fuerza capaz de disputar el centro a quienes ahora lo ocupan". Damborenea record¨® que ha estado toda su vida en la izquierda y asegur¨® que no ha renunciado a sus ideas ni a sus sue?os: "No pertenezco al PP. Pero a¨²n s¨¦ distinguir lo justo de lo injusto, la decencia de la indecencia, la verdad de la mentira, lo principal de lo secundario"."Esto no puede seguir as¨ª", tron¨® su voz en el recinto: "A esto hay que ponerle coto, es la hora de decir basta y hay que decirlo en las urnas, con votos". El ex dirigente socialista argument¨® que la democracia "necesita el triunfo del PP, aunque s¨®lo sea para equilibrar las cosas, porque si no hay equilibrio es mentira que se pueda escoger".
Para Damborenea, el PP es hoy tan importante para la democra,cia como lo fue en 1982 el PSOE. La parte m¨¢s en¨¦rgica del discurso fue la dedicada a "una campa?a miserable" contra "Mercedes de la Merced, una dem¨®crata irreprochable".
El antiguo secretario del PSOE de Vizcaya arremeti¨® contra "todo un presidente del Gobierno que,", dijo, "est¨¢ revolviendo con un cuchar¨®n las tripas de los ciudadanos, excitando los peores recuerdos del pasado". El orador se pregunt¨® qu¨¦ progresistas son ¨¦stos, para responderse que "Aznar habla a la raz¨®n y sus adversarios hablan a la barriga, Aznar habla de buena fe y ellos embaucan, embaucan, embaucan".
Se pregunt¨® luego si todo lo que no sea Felipe Gonz¨¢lez es Franco, para clamar que, a 60 a?os de la guerra civil, el dictador ¡¤"es Historia y donde tiene que estar es en la Historia". Damborenea ironiz¨® sobre los escalofr¨ªos que declar¨® sentir Gonz¨¢lez ante algunas interpretaciones sobre el franquismo y los tild¨® de "gestos f¨¢risaicos". Luego lanz¨® interrogantes sobre los motivos para que los socialistas mantengan las estatuas de Franco, sus monedas y la paga del 18 de julio.
Lo que piensan los j¨®venes de Franco me trae sin cuidado", manifest¨® luego. "Se equivocan, como con Alfonso XIII o con el rey Wamba. Prefiero preguntarles si tienen conciencia social y las manos limpias. Entre la ingenuidad de los j¨®venes al hablar de Franco y la mala intenci¨®n de quienes les juzgan, me quedo con lo primero". El discurso acab¨® con la afirmaci¨®n de que los espa?oles pueden fiarse de Aznar y con un llamamiento: "Si se quiere el cambio, se vota al PP. Lo dem¨¢s son remilgos y excusas".
Aznar hab¨ªa presentado a la estrella del mitin como un viejo amigo, que le telefone¨® hace meses y con el que ha hablado en muchas ocasiones. El l¨ªder del PP advirti¨® que ¨¦l no le hab¨ªa pedido que hablara en un mitin, y que fue el ex secretario del PSOE de Vizcaya quien se lo reclam¨®. Tampoco ha mediado promesa o compromiso alguno, seg¨²n Aznar.
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