"No soy una hermana de la caridad ni accionista de General Motors"
En su despacho le inundan los estuches, abiertos, con condecoraciones. En el sal¨®n contiguo, la mesa est¨¢ repleta de bandejas plateadas con dedicatorias.Pregunta. En esta campa?a electoral Aznar se ha quitado la corbata. Usted se ha quitado tambi¨¦n la corbata, pero se ha dejado los gemelos.
Respuesta. As¨ª es. Unos gemelos que valen 300 pesetas, con los colores de las banderas de los 12 pa¨ªses de la Uni¨®n Europea.
P. Usted se fue a Bruselas para reservarse, cuando no era la hora del PP. Ahora, ?est¨¢ capitaliz¨¢ndose para ser gobernante del PP?
R. Nunca he planteado las cosas en esos t¨¦rminos. He venido con un cierto sacrificio, que estoy muy contento y orgulloso de hacer, porque me siento atra¨ªdo por el proyecto de renovaci¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. No hay pactos debajo de la mesa.
P. Felipe Gonz¨¢lez habl¨® de cambio, y ustedes hablaron luego de cambio. Gonz¨¢lez pidi¨® en la oposici¨®n un Gobierno fuerte y ustedes piden ahora una Espa?a fuerte. ?Est¨¢ todo inventado o es que est¨¢n siguiendo el manual del ¨¦xito socialista al pie de la letra?
R. Esperemos que, en todo caso, el nuestro sea un ¨¦xito de verdad, y no s¨®lo electoral. Lo que nos preocupa no es tanto el ganar las elecciones como que eso sirva para sacar a E9pa?a adelante.
P. ?Le cuesta conciliar la l¨®gica pol¨ªtica, que le lleva a criticar al Gobierno por la crisis econ¨®mica, con la l¨®gica de empresario que ha mantenido hasta hace poco y que le ha llevado a colaborar con el Gobierno para salir de la crisis?
R. Distingamos. Hace bastantes a?os que yo no soy empresario...
P. Sigue teniendo empresas.R. Tengo acciones de empresas, pero desde hace m¨¢s de diez a?os no tengo ning¨²n cargo de consejo de administraci¨®n. Por tanto, no puedo considerarme propiamente empresario. Hasta ahora he sido comisario, y me siento orgulloso de haber colaborado con el Gobierno espa?ol en la defensa de los intereses espa?oles. Y tenga la seguridad de que como espa?ol, y como miembro de la oposici¨®n, siempre estoy dispuesto a colaborar en la defensa de esos intereses. Muy especialmente ahora.
P. Hace tres meses ten¨ªa usted una actitud m¨¢s emprendedora. Invocaba el idioma chino para resaltar que el concepto de crisis se representa con el signo de peligro, pero tambi¨¦n con el de oportunidad.
R. Sigo diciendo que la salida de Espa?a de esta situaci¨®n de postraci¨®n econ¨®mica, y hasta cierto punto moral, es posible con pol¨ªticas adecuadas. No hace tres meses, sino hace nueve a?os que vengo aprovechando cada oportunidad para advertir la necesidad de superar los grandes desequilibrios de la econom¨ªa espa?ola: d¨¦ficit p¨²blico, muy grande y creciente; d¨¦ficit exterior, el segundo del mundo; una inflaci¨®n mayor que la de nuestros vecinos europeos y un nivel de paro que constituye una tragedia social. Incluso cuando nuestra econom¨ªa crec¨ªa m¨¢s que la de nuestros vecinos yo advert¨ªa del peligro de que el souffl¨¦ se pod¨ªa desinflar.
P. Ustedes suelen decir que -CiU tiene un programa econ¨®mico semejante al del PP, y CiU est¨¢ colaborando ahora mismo con el Gobierno. ?Qu¨¦ aportar¨ªan ustedes en ese terreno que no est¨¦ aportando ciu?R. Que haya una peque?a rectificaci¨®n no implica que se est¨¦ haciendo la pol¨ªtica econ¨®mica que nosotros propugnamos, porque sigue existiendo el gran problema de un gasto p¨²blico desbordado, que consume recursos imprescindibles para la inversi¨®n y creaci¨®n de puestos de trabajo. Este Gobierno no tiene la fortaleza ni el respaldo para hacer frente a esas medidas porque parte del apoyo que recibe le reclama gastos adicionales.
P. Lo malo de ser pol¨ªtico y accionista de empresas importante...
R. De ninguna empresa importante soy accionista. Todas son empresas peque?as y medianas. Y estoy orgulloso de haber contribuido a crear 4.000 empleos, de crear riqueza en mi pa¨ªs.
P. ?Lo malo para un accionista y pol¨ªtico es que resulte veros¨ªmil la sospecha de que aproveche la defensa de los intereses generales para sacar beneficio en sus negocios privados? R. Yo no soy accionista de ninguna empresa como la General Motors, que puede permitirse el lujo de decir que cuando la General Motors va bien Estados Unidos va bien.
P. Quiz¨¢ pueda decir que si a usted le va bien, a Ibiza le va bien.
R. Lo que s¨ª es cierto es que si las cosas van bien en la econom¨ªa espa?ola, en un clima de mayor productividad y competitividad, indirectamente resulto beneficiado, como todos los dem¨¢s espa?oles, empresarios, trabajadores o jubilados. Yo comparto el esquema de participaci¨®n pol¨ªtica propio de los pa¨ªses anglosajones, que huyen de dejar la pol¨ªtica exclusivamente en manos de pol¨ªticos profesionales. El sistema anglosaj¨®n trata de enriquecer la vida pol¨ªtica con la participaci¨®n de profesionales, abogados, ingenieros, obreros, empresarios. En general, las personas que se incorporan a la pol¨ªtica en esas condiciones no lo hacen para sacar partido, sino para aportar su experiencia y su vocaci¨®n a mejorar la suerte de su pa¨ªs. Yo no soy una hermana de la caridad, me gusta el poder, pero para conseguir que mi pa¨ªs mejore y salga adelante.
P. Aznar presenta como timbre de honor el vivir de su sueldo, no tener participaciones en empresas y comprar un piso con un cr¨¦dito hipotecario. ?Lo que es un elogio para ¨¦l no le deja en una situaci¨®n inc¨®moda a usted?
R. Aznar es candidato, y yo dir¨ªa que el mejor, a presidente del Gobierno. Ese no es mi caso.
P. ?Su blindaje ante los socialistas consiste en que sabe de ellos cosas que les perjudicar¨ªan tanto como le perjudicar¨ªa a usted que ellos contaran lo que saben de sus negocios?
R. Ese tema no me preocupa en absoluto porque, habida cuenta de mi ejecutoria, no necesito ning¨²n tipo de blindaje.
P.?Nunca ha tenido un desliz en una confidencia con Benegas?R. Ni con nadie. No he tenido deslices ni cosas que ocultar, y por tanto, no hay confidencias que me puedan comprometer.
P. Hasta ahora, casi nadie es capaz de identificar a un partido, en estas elecciones, por una propuesta original o espec¨ªfica sobre el futuro de Europa.
R. La idea que lo resume todo es: queremos una Espa?a fuerte dentro de una Europa fuerte. Es imprescindible un papel relevante y fuerte de Europa para contribuir a definir un nuevo orden mundial, basado en la cooperaci¨®n, la paz y el comercio. Como espa?oles, debemos hacer compatible el avance hacia esa Europa y una defensa m¨¢s firme y sin complejos en los intereses vitales de Espa?a. A los espa?oles nos tienen que salir las cuentas.
P. Si los votantes le pidieran garant¨ªas de que algunos de los m¨¢s relevantes candidatos del PP en estas elecciones no se van a volver a Espa?a en cuanto haya elecciones legislativas, ?pondr¨ªa la mano en el fuego?
R. Nunca voy a coartar la libre elecci¨®n de las personas.
P. Entre esos candidatos hay quien ha dicho que le preocupa que la Guardia Civil llegue a depender de la Generalitat y de alg¨²n "loco" que pueda llegar a su presidencia. ?Le preocupa a usted que cuando se rasca bajo la modernidad del PP aparezcan materiales oxidados?
R. A m¨ª no me preocupa nada cualquier cosa que responda al desarrollo de la Constituci¨®n. Tengo una gran confianza en la capacidad y en el buen sentido de Pujol, y en el de los catalanes a la hora de votar. En nuestro partido, cuanto m¨¢s rascas lo que encuentras es juventud, quiz¨¢ con un exceso de ambici¨®n y en alg¨²n caso inexperiencia. En ning¨²n caso ni herrumbres ni ¨®xidos.
P. Seg¨²n usted, ?cu¨¢les son las consecuencias de estas elecciones en la pol¨ªtica interna espa?ola?
R. Estas elecciones no van a servir para echar a nadie, ni al Gobierno ni a nadie. Como en toda elecci¨®n, los votantes pondr¨¢n su calificaci¨®n al Gobierno. Una victoria del PP apuntar¨ªa hacia el agotamiento de un ciclo pol¨ªtico. Por eso, lo mejor para los intereses de Espa?a y de los propios socialistas es no descalificar a la ¨²nica alternativa viable; un alternativa nacional y preparada, que cuenta con gente m¨¢s experimentada que la que ellos ten¨ªan cuando llegaron al Gobierno. Pero, insisto, no estamos echando a nadie.
P. Hablando de irse. Los obispos acaban de pedir a los empresarios que no se vayan con sus negocios a otros pa¨ªses porque esos pa¨ªses sean m¨¢s baratos.
R. No me gusta comentar declaraciones que no conozco. Yo soy muy respetuoso con los obispos, sobre todo cuanto se trata de cuestiones de la Iglesia. Pero esos mismos obispos nos piden un esfuerzo de solidaridad para que los pa¨ªses del Tercer Mundo salgan adelante. Y el concepto de solidaridad tiene que ir m¨¢s all¨¢ de las fronteras nacionales.
P. ?Lo dice como inversor en la Rep¨²blica Dominicana?
R. Lo digo como miembro de una familia que tiene intereses en compa?¨ªas hoteleras que, efectivamente, han hecho inversiones en la Rep¨²blica Dominicana. Me parece que ¨¦sa es una forma muy solidaria de ayudar a crear empleo y riqueza.
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