Los objetores atender¨¢n en dos turnos las minibibliotecas del Retiro

Las dos min¨²sculas bibliotecas de ladrillo situadas dentro del parque del Retiro volver¨¢n a ser consultadas por los paseantes. La concejal¨ªa de Educaci¨®n, Juventud y Deportes pondr¨¢ a j¨®venes que cumplen el servicio social sustitutorio como bibliotecarios en turnos de siete horas. En la inauguraci¨®n, aplazada sin fecha, la Feria del Libro colocar¨¢ en cada biblioteca los escasos 50 libros que caben en ellas. Los armarios -eso parecen- no tienen cierre y nadie sabe qu¨¦ pasar¨¢ con los vol¨²menes al anochecer.

En cuanto el concejal Jos¨¦ Gabriel Astudillo reclute a los objetores (dos para el turno de la ma?ana, dos para el de la tarde y cuatro para el fin de semana), las bibliotecas, inutilizadas desde la guerra civil, reanudar¨¢n su servicio de pr¨¦stamo. Una de ellas lleva el nombre de Benito P¨¦rez Gald¨®s, porque est¨¢ situada junto al monumento del escritor canario. La segunda est¨¢ escondida en los jardines de Herrero Palacio.El empleo de objetores de conciencia en trabajos municipales ha sido criticado por IU. "El Ayuntamiento tiene que prestar un servicio profesional y los objetores no est¨¢n preparados. Y aunque lo estuvieran, el Ayuntamiento no puede emplearlos como mano de obra gratuita" reclama Franco Gonz¨¢lez, concejal de IU. Astudillo objeta que los j¨®venes no ocupar¨¢n puestos fijos, pues en ning¨²n caso el municipio contratar¨¢ funcionarios.

Tampoco comparten la idea de emplear objetores Carmen A?¨®n ni Jos¨¦ Mar¨ªa Sainz, de la oficina del plan de rehabilitaci¨®n del Retiro. Ellos dise?aron el proyecto de recuperaci¨®n de las bibliotequitas -que pag¨® la Feria del Libro- como "testimonio de una ¨¦poca". No pretend¨ªan que volviesen a ser utilizadas. Para eso, tienen otros planes. "No se puede tener a una persona al sol cuidando 30 libros. Y si as¨ª fuera, tampoco es l¨®gico que los objetores ocupen puestos de trabajo" dice Sainz. "Para fomentar la lectura en el parque hay que acondicionar una sala con colecciones interesantes, no 30 libros regalados. Las casetas existen, s¨®lo falta el dinero", a?ade.

Los libros ya est¨¢n. Jes¨²s Garc¨ªa Bay¨®n, director de la Feria del Libro, se ha encargado de conseguirlos. La que lleva el nombre de P¨¦rez Gald¨®s guardar¨¢ las principales obras del escritor canario. En la otra habr¨¢ ejemplares variopintos, donados por algunas editoriales. Los lectores paseantes podr¨¢n optar entre Fe cristiana, Iglesia y poder, de Gonzalo Puente, y Por una sociolog¨ªa de la vida cotidiana, de Jesus Ib¨¢?ez, entre otras lindezas. "La selecci¨®n no la he hecho yo. ?stos son los libros que me han enviado las editoriales", explica Garc¨ªa Bay¨®n.

Carmen A?¨®n preferir¨ªa que un equipo de profesionales decidiera los libros que ofrecer¨¢ el Retiro para no estar a merced de las editoriales y sus m¨®viles comerciales. Una de las ideas de la restauradora es que la Comunidad estacione de forma permanente uno de sus bibliobuses en el parque. El concejal Astudillo se?ala que para ello s¨®lo har¨ªa falta una autorizaci¨®n municipal.

Las bibliotecas, que no tienen puerta ni llave, estar¨¢n a merced de los v¨¢ndalos, uno de los problemas actuales del Retiro. "Tenemos que estudiar el traslado diario de los libros", dice Astudillo. Garc¨ªa Bay¨®n comenta que se podr¨ªan guardar durante la noche en una dependencia de la Junta Municipal de Retiro o llegar a un acuerdo con el due?o de uno de los bares m¨¢s cercanos. Sainz se pregunta qu¨¦ pasar¨¢ cuando caiga una tromba de agua y el objetor tenga que correr a guarecerse.