Clemente utilizar¨¢ ante Corea la misma alineaci¨®n que form¨® ante Canad¨¢

Clemente tiene decidido su plan para el. partido contra Corea del Sur en la apertura del Mundial. La alineaci¨®n ser¨¢ la misma que present¨® ante Canad¨¢, con una duda que resolver¨¢ en las pr¨®ximas horas: Cam¨ªnero oHierro, en la conducci¨®n del equipo. El jugador madridista se ha recuperado de sus molestias en la rodilla y se encuentra en condiciones de afrontar el encuentro. "Voy a tener que echar una bronca a los fisioterapeutas. Con la recuperaci¨®n de Hierro me han puesto en un apuro", coment¨® jocoso Clemente. El t¨¦cnico apunt¨® los nombres de Luis Enrique, Goikoetxea y Felipe para ocupar los dos puestos en las bandas. El pron¨®stico se inclina por la titularidad de Luis Enrique y Goikoetxea.

La misma pregunta y la misma letan¨ªa de Clemente. "?Qu¨¦ opina del partido con Corea del Sur?". Contestaci¨®n: "Corren mucho, son muy c¨®modos y son dif¨ªciles de distinguir". Ni tan siquiera se ha tomado la molestia de apuntar los nombres de los jugadores. Ha repasado los v¨ªdeos, conoce su sistema y seguro que teme a alguno de los futbolistas coreanos, porque Clemente siempre toma nota del rival. Pero su preocupaci¨®n es relativa. El seleccionador camina por el hotel con una carpeta bajo el brazo con los informes de que ha obtenido de Corea y con su correspondiente dibujo t¨¢ctico. Pero, en lugar de nombres hay n¨²meros."Tendremos que jugar con paciencia, sin caer en las prisas. Es un equipo inc¨®modo, dif¨ªcil de rebasar si te vuelves impaciente", se?ala Clemente. Seg¨²n el t¨¦cnico espa?ol, el aspecto m¨¢s vulnerable de la selecci¨®n coreana es el juego a¨¦reo, problema grave frente a cualquier equipo de Clemente, el hombre que adora a los cabeceadores. Es f¨¢cil adivinar la llegada al ¨¢rea de Nadal, Abelardo, Hierro o Caminero, expertos en el juego alto.

Javier Clemente no ha escondido durante estos d¨ªas su satisfacci¨®n por la actuaci¨®n de Espa?a frente a Canad¨¢, sobre todo en la versi¨®n del primer tiempo. Por ello, parece que su intenci¨®n es alinear a los mismos jugadores que en esa ocasi¨®n: Ca?izares, Ferrer, Abelardo, Nadal, Alkorta, Sergi, Goikoetxea, Caminero, Luis Enrique, Guerrero y Julio Salinas.

La ¨²nica variante ante Corea radicar¨ªa en la inclusi¨®n de Hierro. Su puesto es una inc¨®gnita. La tradici¨®n de Clemente le colocar¨ªa en el medio del campo en lugar de Caminero, pero el entrenador espa?ol siente predilecci¨®n por el jugador del Atl¨¦tico de Madrid. Otra posibilidad es el traslado de Hierro al centro de la defensa para sacar ventaja de su envergadura en las jugadas ensayadas y en alguna llegada por sorpresa al ¨¢rea contraria.

La lectura de Clemente del partido contra Alemania es diferente. Ser¨¢ un choque de trenes. Ha decidido contestar al vigor f¨ªsico de los alemanes con un equipo de muchos kilos y cent¨ªmetros. Los j¨®venes -Sergi y Guerrero- tendr¨¢n problemas para entrar en el equipo titular. Ser¨¢ una guerra. "Somos dos equipos muy parecidos. Si ellos son fuertes, nosotros tambi¨¦n", se?ala Clemente. Y lo dice lleno de satisfacci¨®n. Est¨¢ convencido de que este Mundial ser¨¢ para atletas. "En realidad, siempre es as¨ª", asegura.

"No habr¨¢ un juego elaborado durante el torneo. S¨®lo se jugar¨¢ con un punta y con los equipos metidos atr¨¢s", discute a los que le sacan otras interpretaciones del juego, como ocurre con Colombia o Brasil.Juego corto

Clemente considera que el juego corto le obliga a morir en el centro del campo y perder la pelota en una zona peligrosa. Viene con preocupaciones, sin aceptar ning¨²n riesgo: si hay que perder el bal¨®n es mejor hacerlo en el ¨¢rea rival, tras un pelotazo desde el centro del campo a Julio Salinas, que har¨¢ de hombre diana, en la mejor tradici¨®n del f¨²tbol ingl¨¦s.

Clemente no har¨¢ ninguna concesi¨®n. La pelota ir¨¢ alta y habr¨¢ una abdicaci¨®n casi total del toque en el medio del campo. No es su estilo. Los jugadores lo saben y tratan de adaptarse a las instrucciones del t¨¦cnico. Algunos pasan dificultades. Vienen de las ant¨ªpodas, como Guardiola, Felipe, Begiristain o incluso Guerrero, jugadores que disfrutan con el bal¨®n en el piso. No ser¨¢ esta vez. Clemente ha decidido morir con la suya, con un estilo que le remite a sus primeros tiempos como entrenador de f¨²tbol.