El mayor campo de refugiados del mundo
Cerca de 300.000 ruandeses que han huido e la guerra malviven en la ciudad tanzana de Benaco
A medida que la intervenci¨®n francesa en Ruanda parece m¨¢s inminente crece la tensi¨®n en el campo de refugiados de Benaco, el mayor del mundo, con m¨¢s de 300.000 habitantes, en su mayor¨ªa de la etnia hutu. Desde mediados del pasado mes de abril, Benaco, a unos 15 kil¨®metros en el interior de territorio tanzano, se ha convertido en la segunda ciudad m¨¢s populosa de Tanzania, despu¨¦s de la capital, Dar Es Salam.Decenas de organizaciones humanitarias trabajan desde hace unas seis semanas en este campo de refugiados para atender a una poblaci¨®n que contin¨²a llegando a un ritmo de casi 2.000 por d¨ªa, huyendo del terror y de la guerra a trav¨¦s de diferentes puntos de la frontera. Hasta ahora la mayor preocupaci¨®n de estas organizaciones humanitarias, as¨ª como del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), era abastecer a la poblaci¨®n de agua, comida y de una infraestructura sanitaria, pero desde la semana pasada la seguridad ha pasado a convertirse en objetivo prioritario.
No s¨®lo brotes de delincuencia, como en cualquier otra gran ciudad del mundo, han comenzado a detectarse, sino, lo que es m¨¢s grave, se han producido amenazas contra los miembros de las organizaciones humanitarias e incluso varios de ellos, entre los cuales se encontraban algunos de la secci¨®n espa?ola de M¨¦dicos Sin Fronteras, fueron rodeados el pasado d¨ªa 15 por unas 3.000 personas armadas con machetes, hachas, piedras y lanzas exigiendo la puesta en libertad del l¨ªder hutu, Jean Baptiste Gatete, se?alado por parte de la poblaci¨®n como responsable de la muerte de miles de personas de la etnia tutsi en el este de Ruanda.
Finalmente, el ACNUR decidi¨® poner a Gatete en manos de la polic¨ªa tanzana para su custodia, pero las autoridades de dicho pa¨ªs optaron por ponerle en libertad, ya que, seg¨²n dijeron, las leyes nacionales impiden detener a alguien que no ha cometido ning¨²n delito en su territorio. A partir de ah¨ª, los hechos se han desencadenado a una enorme velocidad y los 12 miembros del equipo de M¨¦dicos Sin Fronteras de Espa?a abandonaron el trabajo que ven¨ªan desarrollando y el domingo decidieron salir en direcci¨®n a Nairobi.
No obstante, el equipo espa?ol de M¨¦dicos Sin Fronteras asegur¨® el lunes que las razones de su abandono temporal del campo de Benaco no s¨®lo se deben a la inseguridad reinante en el recinto para los musungos (hombre blanco, en lengua swahili), sino por problemas morales y de conciencia: "Los rumores indican que el campo de Benaco puede ser la retaguardia de un ej¨¦rcito o milicia hutu que intentar¨ªa reponer sus fuerzas para entrar en Ruanda", explican.
El personal de las distintas organizaciones humanitarias que trabaja en Benaco da como seguro que en el interior de dicho campo existen numerosas armas, extremo que confirm¨® posteriormente una fuente oficial del ACNUR: "No podemos hacer nada, s¨®lo ayudar a los refugiados que siguen llegando y a Tanzania, que se ha encontrado con este problema en sus manos", destac¨® dicha fuente.
A la tensa situaci¨®n que se vive en Benaco vienen a sumarse las noticias de los duros enfrentamientos que tienen lugar en Ruanda y en la capital, Kigali. Estas noticias se reciben en Benaco a trav¨¦s de la Radio Mil Colinas, emisora controlada por la milicia hutu, que transmite mensajes alentando a la poblaci¨®n a matar musungos, lo que no se ha producido.
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