No hay arte sin disciplina
El correcto ordenamiento de Suiza super¨® la arbitrariedad rumana, en un partido de tr¨¢mite parejo hasta que los suizos volcaron a su favor el resultado.
Con el bal¨®n. Lo de Suiza no fue m¨¢s que un manejo correcto, sencillo en la b¨²squeda de su mejor jugador: Sutter. Rumania depende de Hagi. Lo dem¨¢s es traslado y choque, ya que tiene algunos jugadores habilidosos, pero no criterio colectivo.
Sin el bal¨®n. Suiza esper¨® en zona con cuatro en el fondo y tir¨® el fuera de juego con oportunismo. Se reforz¨®, defensivamente, con la presencia de un volante tap¨®n en el m¨¢s tradicional estilo suramericano. Presion¨® en el medio con m¨¢s organizaci¨®n que energ¨ªa y result¨® muy efectivo. Rumania despu¨¦s de perder la pelota nunca acertaba a reorganizarse para defender y ofrec¨ªa enormes espacios negros.
Orden. Rumania es un equipo a imagen y semejanza de Hagi. Digamos que resulta an¨¢rquico. Precisa referencias claras para disciplinarse. Contra Colombia dispuso marcas personales y le fue mejor porque le oblig¨® a la concentraci¨®n.
Arsenio. Defini¨® Arsenio Iglesias al f¨²tbol como la comuni¨®n del orden y el talento. Este partido le volvi¨® a dar la raz¨®n. Vimos en Rumania que no puede haber talento sin orden.
Invento. La moda del c¨®rner de a dos, implantada en este Mundial, parece haber encontrado el ant¨ªdoto. Simplemente se colocan dos defensores a la distancia reglamentaria y se acab¨® el invento. Dur¨® menos de lo previsto.
Sutter. Fue el jugador m¨¢s importante del partido. Tiene manejo y criterio cuando participa en la gestaci¨®n y sentido de la profundidad en la zona de definici¨®n. Tambi¨¦n es disciplinado cuando le toca defender.
Hagi. Tuvo un par de apariciones felices en el primer tiempo, una de ellas el gol y desapareci¨®.
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