El Parlamento Europeo tiene la ¨²ltima palabra

Los eurodiputados surgidos urnas el 12 de junio tendr¨¢n manos el nombramiento definitivo del preside la Comisi¨®n Europea como resultado de los nuevos poderes obtenidos por el Parlamento Europeo gracias al Tratado de Maastricht. La sesi¨®n constitutiva de la Euroc¨¢mara, que se celebrar¨¢ la pr¨®xima semana, incluir¨¢ un discurso del candidato a la sucesi¨®n de Delors ante el plenario, que luego proceder¨¢ a Notar la confianza.Esta votaci¨®n no tiene todav¨ªa valor vinculante, pero una derrota parlamentaria de la persona propuesta por el Consejo Europeo significar¨ªa la imposibilidad pol¨ªtica de su nombramiento. Si el voto es positivo, tal como se prev¨¦, no terminar¨¢ todav¨ªa ah¨ª el largo proceso que debe desembocar en la votaci¨®n de confianza ya con valor jur¨ªdico. En tal caso, el nuevo presidente abrir¨¢ consultas para el nombramiento de los nuevos comisarios, que oscilar¨¢n entre 18, si s¨®lo se incorpora Austria a la Uni¨®n -cuesti¨®n ya decidida por refer¨¦ndum popular-, y 21, si tambi¨¦n ingresan Finlandia, Suecia y Noruega, y realizar¨¢ una propuesta acompa?ada de las carteras que debe ocupar cada uno de ellos.

El Parlamento quiere dedicar entonces sesiones especiales de audici¨®n de todos y cada uno de los candidatos a comisario, a cuyo t¨¦rmino realizar¨¢, ya en diciembre, una votaci¨®n global de confianza hacia la Comisi¨®n. ?sta ser¨¢ la votaci¨®n definitiva y vinculante que permitir¨¢ la instalaci¨®n de la nueva Comisi¨®n el 6 de enero.

No se puede descartar sobre el papel que las sesiones puedan suscitar correcciones y modificaciones en el reparto de carteras o incluso en el nombre de alg¨²n comisario. Los Estados miembros y la propia Comisi¨®n desean evitar estas audiencias, precisamente por temor a que una discrepancia pueda hacer descarrilar el proceso entero y obligue entonces a empezarlo todo de nuevo.