De profesi¨®n, 'disc jockey'

"Cuando ten¨ªa 16 a?os me fabriqu¨¦ mi primera emisora de radio", afirma Juanma Ortega un disc jockey de Los 40 Principales que, con s¨®lo 28 a?os, lleva ya 10 trabajando. Pasi¨®n por la radio, juventud y experiencia reflejan el perfil del pinchadiscos en Espa?a."La mayor¨ªa empezamos en radios piratas que nos ayudaron a dar el salto a las grandes cadenas", asegura Paco Casas, de 28 a?os, mientras mezcla la m¨²sica de sus compactos con la publicidad y las noticias, que selecciona en la pantalla de su ordenador. Durante las cuatro o cinco horas que permanecen en antena todo el trabajo es suyo, en todas las cadenas se hace autocontrol. Tienen que preocuparse de improvisar, de hablar ante el micro de forma natural y como dice Paco "de que no haya un momento de silencio, porque para el oyente cinco segundos sin sonido son horas".

Yolanda Valencia siempre ha trabajado en Los 40, primero en Algeciras y luego en Madrid, como todos, con s¨®lo 27 a?os tiene ya m¨¢s de 10 de experiencia. Cuando habla de m¨²sica se le abren los ojos y le sale un ligero acento del sur que muestra su pasi¨®n, y cuando habla de su trabajo, insiste, una y otra vez, en que lo m¨¢s importante es "comunicar". Aunque, como apuntan los directores de las distintas emisoras, tambi¨¦n hay que tener buena voz.

Ni Yolanda, ni sus compa?eros se quejan de sus condiciones detrabajo. "En el fondo los pinchadiscos no somos m¨¢s que vendedores. Tenemos que estar alegres, nosotros le ponemos m¨²sica a la vida, realmente hipotecamos una parte de nuestras vidas, hasta donde nos interese", asegura Yolanda. Trabajan seis d¨ªas a la semana. Cuatro o cinco horas de su jornada las pasan delante del micro y luego tienen que preparar sus programas. El trabajo es duro pero nadie se queja. Sus contratos art¨ªsticos les garantizan el d¨ªa a d¨ªa, y a cada uno cobrar una cantidad diferente. "A m¨ª me parece lo justo", asegura, con cara de satisfacci¨®n, Juanma.

Lo que ya les gusta menos es presentar la publicidad y muchas veces les toca hacerlo. "Se pierde credibilidad", asegura Yolanda.

La mayor¨ªa han rotado por diferentes cadenas. La cantera son Los 40 Principales, por donde han pasado todas la voces que se oyen en las distintas emisoras de radio f¨®rmula. Para salir de las radios piratas se tuvieron que presentar a concursos y ganarlos. Juanma, que ahora presenta la lista de los 40 los s¨¢bados por la ma?ana, recuerda que un concurso cambi¨® su vida: "Iba a estudiar f¨ªsicas y me qued¨¦ en COU. Para presentar se necesita un cultura b¨¢sica, pero una vez que te metes en la radio ya no te queda tiempo". La mayor¨ªa de los pinchadiscos han sufrido un proceso parecido. Yolanda asegura que son "autodidactas" y Paco que "todos los d¨ªas se aprende algo".

Sin embargo, pese a no haber perdido la pasi¨®n por su trabajo no se consideran estrellas. Para ellos, lo mismo que para sus jefes, los protagonistas son los programas y la m¨²sica. Para Paco "la ¨²nica figura que sobresale por encima de los dem¨¢s es Abell¨¢n, con su peculiar manera de despertar a los oyentes en Cadena Cien".

Aunque todas las cadenas tienen gente m¨¢s o menos conocida, como Quique Supermix en Onda Cero o Santiago Alcanda y Rafael Abitbol en M-80, la realidad es que la mayor parte de las horas las hacen equipos de 10 o 12 pinchadiscos que, aunque les gusta que se aprecie su trabajo, no son grandes figuras de la radio.

Al principio se muestran reacios a hablar de la gente que les sigue, les escribe, les manda regalos y que como dice Yolanda "notan si un d¨ªa est¨¢s de buen o de mal hunor". Todos han tenido historias bonitas. Desde la devota de Juanma que pr¨¢cticamente a diario le andaba una prenda a la emisora, hasta la valenciana que un d¨ªa decidi¨® mandarle a Yolanda un rolex de oro "como prueba de las horas, minutos y segundos que le ha hecho disfrutar".

Sin embargo, la popularidad tambi¨¦n les ha jugado alguna mala pasada. Yolanda habla con una cierta precauci¨®n de un oyente "trastornado" del que todos los d¨ªas recibe una carta o un paquete. "He tenido problemas con gente que est¨¢ muy mal, muy solos. Se pensaban que les hablaba a ellos. El chico que me manda las cartas las termina diciendo 'recuerdos a tus padres que son mis suegros'. Son gente que se creen que soy parte de ellos. Por un lado piensas que se les va la cabeza pero por otro te sientes bien, por ser el sue?o de alguien. Por lo menos es interesante"

Aunque los dise jockeys viven el d¨ªa a d¨ªa todos ven su futuro ligado a la radio. Paco quisiera usar su voz en publicidad o en programas de radio convencional. Yolanda no se quiere alejar de la m¨²sica porque es lo que m¨¢s le gusta. Juanma apuesta por la radio f¨®rmula porque "la tecnolog¨ªa que est¨¢ llegando la va a revolucionar". Pero todo son sue?os e ilusiones, porque como se?ala Luis Merino, director de la Cadena 40, "a la larga alguno ser¨¢ muy conocido, otros desparecer¨¢n y el resto pasar¨¢ a hacer otras formas de radio o de comunicaci¨®n. No hay que olvidar que Paco Lobat¨®n tambi¨¦n fue disc jockey de 40".