"Vine a Espa?a a hacer m¨²sica y no a pelearme"

Jes¨²s L¨®pez Cobos dirigi¨® por ¨²ltima vez en Espa?a en noviembre de 1988, ese mismo mes present¨® su dimisi¨®n como titular de la Orquesta Nacional de Espa?a (ONE). Desde entonces no ha empu?ado la batuta en su pa¨ªs hasta el pasado jueves, en Perelada, dirigiendo a la Orquesta de C¨¢mara de Lausanne. Fue director titular de la ONE de 1984 a 1988.Pregunta. ?Tan mala fue su experiencia en Espa?a?

Respuesta. Para mi fue una gran decepci¨®n, pero lo ten¨ªa que hacer. Cre¨ªa que lo deb¨ªa hacerlo. Cuando me march¨¦ de Espa?a para estudiar, en 1966, tuve ayudas de la Fundaci¨®n March, una beca de intercambio del Ministerio de Asuntos Exteriores, y dos pr¨¦stamos de protecci¨®n escolar, que devolv¨ª religiosamente. Me sent¨ªa moralmente obligado a hacer algo por mi pa¨ªs cuando me lo pidieran. Cuando vine en 1982 ya era director art¨ªstico de la ¨®pera de Berl¨ªn y hab¨ªa dirigido en Estados Unidos y Gran Breta?a. No era un don nadie. Sab¨ªa que para mi carrera volver a Espa?a era un frenazo.

P. ?Por qu¨¦ volvi¨®?

R. Me hac¨ªa ilusi¨®n. Conoc¨ªa bien la mentalidad de las orquestas espa?olas, hab¨ªa dirigido espor¨¢dicamente la ONE y a la Orquesta de Radiotelevisi¨®n (ORTVE). Sab¨ªa qu¨¦ problemas ten¨ªan. Cre¨ªa que hab¨ªa llegado el momento propicio para intentar un cambio de mentalidad a todos los niveles. Que la gente se dar¨ªa cuenta que la ONE ten¨ªa que ponerse al d¨ªa. Durante los cuatro, a?os que estuve al frente de la orquesta hice todo lo posible para cambiar la mentalidad que hab¨ªa. No se Pod¨ªa seguir con el m¨²sico funcionario, que tiene su puesto para toda la vida. Vine a Espa?a a hacer m¨²sica y no a pelearme en el Ministerio de Cultura o con los m¨²sicos todos los d¨ªas. Han transcurrido seis a?os desde me fui y las cosas est¨¢n igual.

P. ?Por eso no ha querido dirigir en Espa?a?

R. No quiero dirigir a una orquesta espa?ola. Despu¨¦s de ver c¨®mo se dilapid¨® el dinero en 1992 en cosas innecesarias, cuando hay tantas que lo son, como la ense?anza de la m¨²sica, prefer¨ª no tomar parte. Creo que soy el ¨²nico m¨²sico espa?ol que no particip¨® en los fastos del 92 y estoy encantado. Incluso lo uso como bot¨®n de orgullo. '

P. ?Qu¨¦ remedio para que los directores no abandonen las orquestas espa?olas?

R. El futuro de la m¨²sica en Espa?a empezar¨¢ el d¨ªa en que cambie la ense?anza. Desde el principio dije a la ONE y al Consejo de la M¨²sica que hab¨ªa que reformar la ense?anza musical. La educaci¨®n es la de siglo XIX y no da resultados. No hay int¨¦rpretes de instrumentos sin tradici¨®n, como los de cuerda. Para trompetistas no hay problema: se convoca una oposici¨®n y aparecen 10 vicentes de Valencia, pero cuando falta un viol¨ªn no se presenta ning¨²n espa?ol.