La crisis cubana estalla tambi¨¦n en el ballet
En el estreno de 'Cleopatra eterna', un p¨²blico dividido silba y corea a Castro
ROGER SALAS Cleopatra eterna, un costoso espect¨¢culo protagonizado por Alicia Alonso y el Ballet Nacional de Cuba, se estren¨® el mi¨¦rcoles en el madrile?o teatro Alb¨¦niz. A tono con la actual crisis cubana, la representaci¨®n acab¨® entre gritos, silbidos y ovaciones. Mientras las voces del exilio se alzaban con un "?Viva Cuba libre!" el numeroso sector oficialista gritaba "?Socialismo o muerte!". El teatro se llen¨®, y al final de la funci¨®n, un montaje claramente preparado de antemano convirti¨® los saludos en un vergonzoso circo. La direcci¨®n del ballet, por su parte, se limit¨® ayer a indicar que la representaci¨®n hab¨ªa sido "un gran ¨¦xito", mientras crecen los rumores sobre una deserci¨®n masiva de bailarines.
El propio marido de Alicia Alonso, Pedro Sim¨®n, y otros miembros del ballet cercanos a la directora, gritaban enardecidos desde el fondo del patio de butacas. La organizaci¨®n hab¨ªa repartido ramos y cadenetas de flores entre sus incondicionales para que las lanzaran al escenario al terminar la velada. La alternancia de sonoros aplausos con silbidos provoc¨® un confuso colof¨®n. Al final, por n¨²mero, se impusieron los aplausos y los gritos de "?Viva Fidel, socialismo o muerte!".Mar¨ªa Cuesta, una cubana del exilio aseguraba en la puerta del teatro: "Hay much¨ªsima gente de la embajada aqu¨ª, y es terrible que vengan a Madrid para extender la propaganda de que la Cuba de Castro es maravillosa. Se han confundido de pa¨ªs, estamos en Europa y hemos pagado por ver una representaci¨®n de ballet, y no un mitin pol¨ªtico". Gustavo Fern¨¢ndez Lima, un activista de la emigraci¨®n cubana dec¨ªa: "Sab¨ªa que Alicia Alonso era la principal vocero cultural de Fidel, pero entre la entrevista en la que quitaba importancia a la crisis de los balseros y lo de hoy, creo que est¨¢ yendo muy lejos".
El estreno de Cleopatra eterna cont¨® con una numerosa presencia de la profesi¨®n espa?ola de la danza, que un¨¢nimemente opin¨® sobre la baja calidad de la pieza y el lamentable estado de deterioro de Alonso, a punto de cumplir 77 a?os. Una discreta bailarina del cuerpo de baile cubano, pese al temor a ser identificada, no pudo reprimirse: "Alicia ha impuesto como core¨®grafo a su nieto, Iv¨¢n Monreal, que no es un creador; siempre fue un limita
Alicia Alonso reproduce en Madrid el dilema de Castro
El estreno en Madrid de Cleopatra eterna, el espect¨¢culo de Alicia Alonso y el Ballet Nacional de Cuba, reprodujo de forma parad¨®jica lo que sucede en la isla caribe?a. La representaci¨®n acab¨® entre silbidos y ovaciones. "?Viva Cuba libre!", gritaron las voces del exilio, para ser acalladas por el coro mucho m¨¢s numeroso del sector oficialista con el lema cl¨¢sico: "?Viva Fidel, socialismo o muerte!".Muchos de los bailarines no escond¨ªan su descontento con la gesti¨®n de Alonso ni negaban los rumores que vaticinan una deserci¨®n masiva cuando acabe la gira. "Claro que nos sentimos vigilados", dijo uno de ellos. "Al final de esta gira habr¨¢ sorpresas", asegur¨®.P¨¢gina 19 do bailar¨ªn sin talento ni experiencia, pero ahora se trata desesperadamente de perpetuar el linaje. Estrenaremos el domingo un ballet sin terminar de Alberto M¨¦ndez, que se ha quedado en Cuba y que ha negado su autorizaci¨®n al estreno ya que no quiere que se haga su pieza en esas condiciones, pero aqu¨ª, en esta compa?¨ªa, los criterios individuales o art¨ªsticos ya no cuentan para nada".
Deserci¨®n masiva
Son muchos los bailarines del Ballet Nacional de Cuba que querr¨ªan hablar, pero temen represalias dentro y fuera de la escena. En el mejor estilo bolchevique, la n¨®mina de la compa?¨ªa cubana cuenta con varios t¨¦cnicos camuflados y administradores que son en realidad comisarios pol¨ªticos atentos a cualquier supuesto desvar¨ªo. "Los bailarines militantes del partido, aunque est¨¦n viejos o no bailen, no pueden faltar en la gira", asegura un bailar¨ªn, para a?adir: "claro que nos sentimos vigilados, y ellos saben que al final de esta gira habr¨¢ sorpresas".
En Madrid se hacen quinielas sobre el n¨²mero de artistas cubanos que desertar¨¢n al terminar la gira espa?ola o incluso antes, y en Miami se habla insistentemente de que es el momento justo para crear un "Ballet Cubano Independiente en el Exilio", para lo que ya parece haber financiaci¨®n de la potente colonia cubana de Miami. La situaci¨®n actual recuerda la hist¨®rica deserci¨®n de 12 bailarines cubanos en Par¨ªs en 1966. De hecho, varios familiares de miembros del Ballet Nacional de Cuba que viven fuera de la isla se han desplazado a Madrid para convencer a los suyos de desertar: "Es una oportunidad irrepetible. Alicia Alonso se ha visto en la necesidad de traer a Madrid a los j¨®venes ante las m¨²ltiples hu¨ªdas de los artistas m¨¢s formados. Ya con el ballet sovi¨¦tico pas¨® hace a?os. Despu¨¦s la URSS se hundi¨®, y as¨ª suceder¨¢ en Cuba", asegura una bailarina.
El exilio cubano en Madrid se ha mostrado muy discreto con la presencia del Ballet Nacional de Cuba en la capital espa?ola en medio de la crisis que asola el pa¨ªs caribe?o. Solamente el primer d¨ªa, dos espont¨¢neos alertaban en la puerta del Alb¨¦niz: "comprar entradas para Alicia Alonso es darle dinero a Fidel Castro".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
