La vuelta
Lo peor de las vacaciones no es que se acaben; lo peor de las vacaciones es que, a la vuelta, todo el mundo se empe?a en contarte las suyas.Lo peor de las vacaciones, aparte de la ruina econ¨®mica y moral en que te dejan, es ese af¨¢n que tiene la gente por contarle a los dem¨¢s sus viajes o sus descubrimientos veraniegos hasta la m¨¢s m¨ªnima aventura.
Los hay fundamentalmente de dos clases: los del ¨¢lbum de fotos y los del v¨ªdeo.
Los primeros se caracterizan porque se pasan todo el mes de septiembre con su ¨¢lbum de fotos bajo el brazo para endosarte el relato completo de su viaje a Grecia o a la India en cuanto te descuidas.
Los segundos son a¨²n peores. Desde que llegan, se dedican a llamar a los amigos para invitarles a cenar en casa con el prop¨®sito encubierto de, a los postres, endilgarles el video de su viaje con comentarios ad hoc y al un¨ªsono:
-Mira. Ese negro de atr¨¢s era el gu¨ªa -dice ¨¦l.
-Y ¨¦se el due?o del hotel donde dormimos -dice ella, antes de empezar a discutir con el marido sobre si el gu¨ªa era simpatico o no y sobre si el hotel estaba m¨¢s o menos limpio.
Porque, dentro de los viajeros pesados, hay dos tipos: los que te cuentan lo bien que lo pasaron y, al contrario, los que parecen disfrutar contando lo mal que lo pasaron por culpa de los hoteles, las carreteras infames, las comidas, el calor y, ¨²ltimamente tambi¨¦n, de los fundamentalistas. Son los que yo llamo los viajeros masoquistas.
Para los que no veranean, o para los que, como yo, lo hacemos siempre en el mismo sitio, la vuelta de las vacaciones se convierte de ese modo en un suplicio que algunos llevan estoicamente y otros con menor soltura.
- Yo soy de los segundos. Durante el mes de septiembre, procuro no coger mucho tel¨¦fono para evitar las cenas con v¨ªdeo y, en cuanto veo a alguien con un ¨¢lbum de fotos, bajo el brazo, enseguida me despisto. En La historia de Helen Morgan, la pel¨ªcula de Michael Curtiz, que la televisi¨®n pas¨® el otro d¨ªa, alguien dec¨ªa: "Las tres peores cosas que hay son: estar en la cama y no poder dormir, esperar a alguien que no llega, y querer complacer y no complacer". Yo a?adir¨ªa una cuarta, s¨®lo para septiembre: que alguien te cuente sus vacaciones cuando t¨² no haces lo mismo.
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