Rey reclama una Europa abierta y cohesionada desde el Colegio de Brujas
El Rey lanz¨® ayer un comprometido alegato en favor de una Europa pol¨ªtica, que recupere los valores, se asiente en la solidaridad, profundice en su cohesi¨®n econ¨®mica y social y se ampl¨ªe hacia el Este y hacia el Sur. Don Juan Carlos reclam¨® "un gran salto adelante" en la construcci¨®n europea para 1996, fecha en que debe revisarse el Tratado de Maastricht. Con un discurso muy pol¨ªtico, plagado de referencias human¨ªsticas, el Rey inaugur¨® el curso del Colegio de Europa, en Brujas, la principal instituci¨®n dedicada a la preparaci¨®n de cuadros europe¨ªstas, fundada por Salvador de Madariaga en 1949.
Don Juan Carlos fue recibido por el presidente del Colegio, Manuel Mar¨ªn, y recibi¨® una larga ovaci¨®n de los 1.200 asistentes, entre ellos Jacques Delors, varios comisarios y el cuerpo diplom¨¢tico. Personalidades como Margaret Thatcher, Delors Fran?ois Mitterrand o Jacques Santer han precedido a don Juan Carlos en anteriores inauguraciones, todas ellas de gran impacto en el debate pol¨ªtico comunitario."El proceso de integraci¨®n de Europa atraviesa por un periodo especialmente delicado", sentenci¨® de entrada el Rey. "Los europeos y la idea de Europa experimentan cierto malestar", precis¨® refiri¨¦ndose a la conmoci¨®n que han suscitado hechos positivos como el fin de la guerra fr¨ªa o la unificaci¨®n de Alemania, o negativos como la recesi¨®n, "de la que parece que estamos saliendo".
Don Juan Carlos afirm¨® que ¨¦ste "es un momento de peligros, pero tambi¨¦n de oportunidades, como la de dise?ar, esta vez, un modelo nuevo para el conjunto de Europa y no s¨®lo de una parte". Una Europa basada en la ciudadan¨ªa europea -"concepto lanzado desde Espa?a", dijo en la que hemos de progresar m¨¢s, atendiendo a los inmigrados y a los exiliados y refugiados pol¨ªticos. "La integraci¨®n europea ha de significar que ya no habr¨¢ m¨¢s Goyas o Einsteins forzados al exilio a causa de su condici¨®n o de sus ideas" ejemplific¨® el conferenciante.
Espa?a, dijo, "es uno de los pa¨ªses. conscientes" de que hay que renovar la Uni¨®n Europea. El verdadero secreto del ¨¦xito de esta invenci¨®n hasta ahora "es el supranacionalismo", record¨®. Una forma de integraci¨®n "que no acaba con las naciones, ni con los patriotismos, ni mucho menos con los Estados". "Pero que sirve", opin¨®, "para suavizar, para domar los excesos de los nacionalismos" sobre la base de la tolerancia y el compromiso.
En vanguardia
El Rey se aline¨® con la vanguardia europe¨ªsta al propugnar la superaci¨®n del m¨¦todo originario de construcci¨®n comunitaria propugnado por el padre fundador Jean Monnet: Jas "solidaridades de hecho". Estas, aventur¨®, "ya no pueden derivarse mec¨¢nicamente de la integraci¨®n econ¨®mica, sino que deben ser el resultado de decisiones eminentemente pol¨ªticas".
?Cu¨¢les? "Las decisiones econ¨®micas que tenemos ante nosotros", precis¨®, "afectan a lo m¨¢s profundo de las soberan¨ªas nacionales -como la moneda o los impuestos o, m¨¢s all¨¢ de la econom¨ªa, la pol¨ªtica exterior-, y esta Uni¨®n Europea debe fundamentarse en una Europa pol¨ªtica que, en gran parte, falta todav¨ªa". Por ello, 1996, a?o en que debe revisarse el Tratado de Maastricht, "deber¨ªa ser el a?o de un gran salto adelante".
Abog¨® por la culminaci¨®n del mercado ¨²nico, la competitividad europea y las econom¨ªas de escala que suponen las grandes redes de comunicaciones. "Pero Europa debe ser tambi¨¦n un modelo de solidaridad interna. Algo que constituye uno de los signos de identidad y una de las razones por las que hemos de desarrollar la pol¨ªtica social de la Uni¨®n". ?sa es la base de la pol¨ªtica de cohesi¨®n que debe fortalecerse, seg¨²n el Rey.
Y tambi¨¦n de solidaridad externa: "La idea de una Europa fortaleza ha quedado superada por el fin de la guerra fr¨ªa", y deben crearse ¨¢reas de asociaci¨®n con el Este (con lo que asum¨ªa las pretensiones alemanas) y el Sur (con lo que subrayaba la postura de los pa¨ªses mediterr¨¢neos), mediante incorporaciones graduales. Don Juan Carlos cit¨® a los pa¨ªses de la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica y a los del Magreb: "Frente a este futuro, no hay elecci¨®n entre ampliar y profundizar. Son dos verbos que debemos conjugar a la vez", sentenci¨®.
Tras constatar que una guerra total es improbable, pero no las guerras locales (como en la ex Yugoslavia), el conferenciante hizo votos para que la UE adquiera "una aut¨¦ntica capacidad de acci¨®n en la escena internacional", idea fuerza sobre: la que deber¨ªa progresar la pol¨ªtica exterior y de seguridad com¨²n. Y explic¨® con un punto de emoci¨®n el orgullo que sinti¨® cuando, por primera vez en la historia, "v¨ª soldados espa?oles desfilar, por los Campos El¨ªseos el 14 de julio, con soldados franceses, alemanes, belgas y luxemburgueses".
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