Aza?a

Me permito a trav¨¦s de estas l¨ªneas adherirme a las opiniones, vertidas en este peri¨®dico por los se?ores Mariscal y Vidal Folch, sobre la idea de Estado de Manuel Aza?a. A los espa?oles cuya familia sufri¨® c¨¢rcel y exilio, precisamente por defender a ese Gobierno, leg¨ªtimamente elegido a trav¨¦s de las urnas y presidido no casualmente por Manuel Aza?a, esta nueva adoraci¨®n por parte de la derecha hacia Manuel Aza?a no es que nos produzca estupor, sino simplemente hilaridad.Yo rogar¨ªa a estos se?ores que de la misma forma que sus antecesores, y casualmente en el mismo peri¨®dico, sacaron de contexto y utilizaron la famosa frase: "Espa?a ha dejado de ser cat¨®lica", para su propia propaganda pol¨ªtica, se abstuvieran de hacer lo mismo utilizando una figura que, ?vamos a ser serios!, les importa muy poco lo que realmente pensara o no pensara; se trata de malinterpretarlo en su propio beneficio. Y, por favor, ampl¨ªen sus conocimientos hacia lo que realmente fue el pensamiento en el tr¨¢gico exilio.

Debo tambi¨¦n decir que me extra?a por omisi¨®n la falta de memoria hist¨®rica de ciertos "periodistas separadores" sobre un episodio "divertido" que podr¨ªamos titular Los viajes de Manuel Aza?a al extranjero. Son relatos cortos, pero muy pedag¨®gicos, sobre las relaciones de Manuel Aznar (abuelo del actual presidente del PP) y el Gobierno de la Rep¨²blica en plena guerra civil, a la sazon presidido por Manuel Aza?a.- Pilar S¨¢enz Masip.