Un campe¨®n diferente
Antonio Rodr¨ªguez, parapl¨¦jico, de 31 a?os, es campe¨®n de Espa?a de motos acu¨¢ticas.
La par¨¢lisis que desde hace cuatro a?os afecta a las piernas de Antonio Rodr¨ªguez, To?ejo, no le ha impedido convertirse en 1993 en el campe¨®n de Espa?a de motos acu¨¢ticas, en la categor¨ªa biplaza.Este madrile?o de 31 a?os volvi¨® ayer, en la ¨²ltima prueba del campeonato nacional, celebrada en el lago de la Casa de Campo, a vencer a todos sus competidores. Una oleada de aplausos y v¨ªtores le rode¨®. To?ejo fue besado, apretado, sonre¨ªdo y abrazado como un h¨¦roe. Tras su victoria, hay una historia humana. No obstante, a pesar de esta victoria, no ha conseguido retener el t¨ªtulo ¨¦ste a?o. "No importa, no suelo rendirme f¨¢cilmente. La pr¨®xima temporada lo volver¨¢ a intentar", comenta.
To?ejo, desde hace cuatro a?os, ocupa una silla de ruedas a causa de un accidente de moto. En aquel momento, el piloto compet¨ªa a m¨¢s de 160 kil¨®metros por hora sobre su quad (moto de cuatro ruedas). Participaba en el Raid Quinto Centenario, en Huelva.
"Lo recuerdo perfectamente. Llegu¨¦ a un bad¨¦n sin se?alizar y me estrell¨¦ contra la pared". To?ejo se fractur¨® por tres sitios la columna vertebral y se parti¨® 16 costillas. "Lo ¨²nico que pens¨¦ en aquel momento fue: ?esta vez si que la he hecho buena!". Estuvo en un hospital nueve meses.
Durante el tiempo que permaneci¨® ingresado, su cabeza no dej¨® de cavilar c¨®mo seguir compitiendo. Desde los ocho a?os, hab¨ªa demostrado su habilidad en el motociclismo. "Cuando estaba en el hospital, tuve una idea. ?Qu¨¦ me imped¨ªa montar sobre una moto de agua. Se lo consult¨¦ al m¨¦dico. No supo darme una respuesta".
Su moto acu¨¢tica, una Jamaha Wave Raider de 785 cent¨ªmetros c¨²bicos, logra una velocidad superior a los 100 kil¨®metros por hora. Su nave s¨®lo se diferencia de la de sus competidores en que lleva incorporado un asiento especial que le ata a la altura de la cintura. To?ejo tiene que ser alzado hasta la montura.
Los especialistas consideran asombroso que Rodr¨ªguez pueda vencer al resto de participantes sin contar con la fuerza de sus piernas. "Los pilotos se apoyan en ellas para hacer giros, por ejemplo, mientras que To?ejo debe hacerlo todo con s¨®lo sus brazos", dicen.
To?ejo mantiene que sus victorias se deben s¨®lo al apoyo de sus amigos y t¨¦cnicos [Ralf Saura, Chus Escarpe y el equipo Winston]. Asegura no acostumbrarse a recibir trofeos: "Si la persona que me da la medalla no me conoce, siempre leo lo mismo en su cara: '?Si ¨¦ste ha ganado, c¨®mo ser¨¢ el segundo?".
El piloto prepara ahora cursos de ense?anza para personas con su misma discapacidad. Algunas le escriben cartas pidi¨¦ndole consejo y asisten a sus carreras. "No hay nada que una persona no pueda hacer si lo desea. No somos cautivos de nuestro cuerpo", comenta.
Rodr¨ªguez vive s¨®lo en su piso madrile?o. "Ahora echo de menos a mi novia, Ana, que estudia en Am¨¦rica. A ella tambi¨¦n le gusta el motociclismo". El piloto est¨¢ terminando actualmente su preparaci¨®n para el campeonato del mundo que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo mes en Arizona (Estados Unidos). "Intentar¨¦ lograr una buena clasificaci¨®n", relata.
To?ejo guarda, adem¨¢s, celosamente un secreto para las pr¨®ximas temporadas: est¨¢ dispuesto a cambiar de deporte. "Le digo cual, pero no lo puede publicar. ?De acuerdo?".
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