Esa noche le mataron

VIENE DE LA P?GINA 1La fiesta del Joy Eslava. Cientos de personas sin parar de bailar. Las reinonas desfilando por el escenario. Y Juan Carlos en la pista. Los que le vieron le recuerdan en plena euforia. "Se sub¨ªa y bajaba la camiseta", rememoraba un asistente.

A las dos de la madrugada, la fiesta alcanz¨® su cl¨ªmax con el espect¨¢culo de las drag queen Betty Brown y Shanghay. Juan Carlos, seg¨²n los testigos, permaneci¨® en el concurrido local hasta las cuatro de la madrugada.

Sali¨® de la discoteca solo y sin haber bebido alcohol. Iba disfrazado. La Brigada de Homicidios sostiene que en la Puerta del Sol contact¨® con el senegal¨¦s. Le invit¨®, seg¨²n esta hip¨®tesis, a su buhardilla, posiblemente para mantener relaciones sexuales. La falta de se?ales de violencia en la puerta afianzan esta explicaci¨®n. Los conocidos de la v¨ªctima, sin embargo, mostraron su extra?eza ante esta posibilidad.

Los vecinos interrogados por este peri¨®dico recuerdan que aquella madrugada se desat¨® una fuerte discusi¨®n en la vivienda. Se escucharon voces masculinas y carreras. "Tras la bronca pudimos o¨ªr c¨®mo alguien hu¨ªa", coment¨® un inquilino. Nadie, sin embargo, se preocup¨®.

Al d¨ªa siguiente, sobre las cinco de la. tarde, la portera de este inmueble de paredes desconchadas y techo bajo descubri¨® el cad¨¢ver. Estaba tendido sobre un sof¨¢: las u?as largas, desnudo, maniatado. El asesino lo hab¨ªa matado a pu?etazos. La v¨ªctima ten¨ªa la mand¨ªbula fracturada y la cara ensangrentada. En la vivienda, desordenada y llena de pelucas, faltaba un televisor de 14 pulgadas y una cadena musical.

En un principio, los investigadores barajaron el m¨®vil sexual.

Esta perspectiva cambi¨® cuando la Polic¨ªa Cient¨ªfica descubri¨® en el lugar del crimen las huellas dactilares de Al¨ª. El sospechoso luc¨ªa un historial con 34 detenciones -29 en Madrid y 6 en Barcelona-.

El lunes fue detenido en un c¨¦ntrico hostal, apenas a 500 metros del escenario del crimen. En su habitaci¨®n se descubri¨® el televisor -identificado por la due?a de la buhardilla-.

Los agentes de la Secci¨®n V de la Brigada Provincial de Polic¨ªa Judicial tambi¨¦n hallaron una chaqueta con sangre, presumiblemente de Juan Carlos. Al¨ª pas¨® ayer a disposici¨®n judicial.

La brutalidad del crimen ha sacudido a las reinonas que participaron en la fiesta. "Es terrible", comentaba a ayer Vampirella, que conoc¨ªa a la v¨ªctima desde hac¨ªa cuatro a?os. Su descripci¨®n muestra a Juan Carlos, malague?o de origen, como un estilista en ascenso -hab¨ªa trabajado para ?ngel Schlesser en la Pasarela Cibeles y, para la peluquer¨ªa Rizos- Ultimamente, tras regresar de un viaje a Turqu¨ªa, hab¨ªa concentrado sus esfuerzos en un estudio de estilismo y en una colecci¨®n de trajes de peluche, silicona y metales.

Los que le conocieron niegan que fuese un transformista. "Aquella noche le dio la locura y para la fiesta se visti¨® de unicornio, pero normalmente iba con vaqueros y camiseta", recordaba ayer Vampirella, para quien la muerte de su amigo nada ten¨ªa que ver con la fiesta del estreno, la ¨²ltima de Juan Carlos Pinto.