Emotiva acogida en Madrid a las monjas de Argel

J. C. "Muerte, ?d¨®nde est¨¢ su victoria?" cantaron al un¨ªsono las religiosas agustinas agolpadas en las escalerillas del pabell¨®n de Estado del aeropuerto madrile?o de Barajas. Justo antes, los empleados de la funeraria, acababan de colocar sobre los catafalcos los f¨¦retros, envueltos en la bandera de Espa?a, con los cad¨¢veres de las misioneras Mar¨ªa ?lvarez Mart¨ªn, m¨¢s conocida como sor Caridad, y Esther Paniagua, ambas asesinadas el domingo en Argel por integristas isl¨¢micos.

Acababa de empezar a lloviznar y estaba anocheciendo cuando, tras cumplir los tr¨¢mites aduaneros, una peque?a caravana de coches f¨²nebres y veh¨ªculos de Aviaci¨®n Civil escoltados por la Guardia Civil, se detuvo ante el pabell¨®n de Estado.All¨ª, en las escaleras, estaban todos. Dolores-Alonso, madre de Esther; sus hermanas C¨¢ndida y Angelita; Gloria, la hermana de Caridad, decenas -de monjas agustinas y un sinf¨ªn de autoridades encabezadas por el ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana. Tambi¨¦n hab¨ªa acudido el nuevo embajador argelino en Espa?a, Abdelaziz Rahabi, reci¨¦n llegado de M¨¦xico."Resucit¨® aleluya, resucit¨® aleluya", rezaban las palabras del responso que entonaron entonces las agustinas mientras surg¨ªan entre los familiares los primeros pa?uelos para -secarse las l¨¢grimas y las gotas de agua.Despu¨¦s, Solana coloc¨® al pie de ambos f¨¦retros sendas medallas de la Cruz de Oficial de la Orden del M¨¦rito Civil para premiar as¨ª, a t¨ªtulo p¨®stumo, su constancia ejemplar en el cumplimiento de su deber.La comitiva se dirigi¨® entonces hasta la Iglesia de los Sagra.. dos Corazones, d¨®nde se celebr¨® un funeral. Hoy Mar¨ªa Alvarez, de 61 a?os, recibir¨¢ sepultura en el pante¨®n de las Agustinas en el cementerio madrile?o de la Almudena" mientras que Esther a ser¨¢ enterrada en el de su congregaci¨®n en de donde era originaria.

Cuando acab¨® la ceremonia en Barajas, Solana estuvo parco ante la prensa. "Es mejor que hable el silencio y el ejemplo de los espa?oles que hacen el bien m¨¢s all¨¢ de nuestras fronteras". Reitero una vez m¨¢s su llamamiento a regresar a aquellos espa?oles residentes en Argelia, unos 300, cuya permanencia en el pa¨ªs no es imprescindible pero a?adi¨®: "Respeto el compromiso que cada uno tiene, respeto a aquellos que quieren quedarse all¨ª".

Las siete augustinas compa?eras de las asesinadas se van a quedar en Argel. Su superiora general, Cecilia Tralde, declar¨® ayer "no sentirse autorizada" para ordenar su salida. "Como comunidad estamos a la escucha de lo que Dios quiera de nosotros, como misioneras, de la real¨ªdad de Argel".?Seguir en Argelia?

Mar¨ªa Jes¨²s Rodr¨ªguez Mu?oz, la superiora de las agustinas en Argel, est¨¢ de acuerdo. "No tenemos vocaci¨®n de morir", coment¨®, pero eso no significa que est¨¦n dispuestas a abandonar Argelia. "Quiz¨¢ cambiemos de lugar de vivienda y nuestro trabajo sea m¨¢s espaciado" para llamar menos' la atenci¨®n y ser un blanco m¨¢s dif¨ªcil para los terroristas islamistas.

La religiosa Mar¨ªa Jes¨²s insiste hasta la saciedad en exculpar al pueblo argelino del atentado. "El radicalismo violento no lo quiere la mayor¨ªa del pueblo", afirma antes de dar cuenta de los numerosos testimonios de solidaridad que ha recibido en Argel por parte de sus vecinos del populoso barrio de Bab el Oued y de las autoridades argelinas.

"Queremos -vivir y llevar la esperanza a los lugares en los que estamos trabajando". "Lo hacemos por fidelidad a nuestra propia opci¨®n religiosa y a un pueblo que nos quiere", concluy¨® emocionada.