En territorio 'liberado' de Argelia
Un equipo de televisi¨®n comprueba la colaboraci¨®n del GIA y el brazo armado del FIS
Un equipo brit¨¢nico de televisi¨®n ha realizado el primer documental que muestra una zona de Argelia controlada por la guerrilla integrista isl¨¢mica y aparentemente abandonada por el Ej¨¦rcito. En la pel¨ªcula se ofrece una visi¨®n sin precedentes de c¨®mo el Ej¨¦rcito Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (EIS), rama militar del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS), opera fuera de las principales ciudades, patrullando por terreno monta?oso y envi¨¢ndo comandos a la capital para perpetrar atentados.En La guerra escondida de Argelia, un documental que se emitir¨¢ por la BBC (televisi¨®n estatal brit¨¢nica) el pr¨®ximo 19 de noviembre, se muestran im¨¢genes de un pa¨ªs que se desliza hacia la guerra civil, con una poblaci¨®n civil aterrorizada tanto por la guerrilla como por las fuerzas de seguridad.
El reportero Phil Rees pas¨® seis semanas en un pa¨ªs en el que han sido asesinados m¨¢s de 20 periodistas y 70 extranjeros. Visit¨® una base del EIS, un campo guerrillero, un imrpovisado hospital y una f¨¢brica de bombas en las colinas de las afueras de Esh Chelif, a 200 kil¨®metros al oeste de la capital. Uno de los guerrilleros que entrevist¨® describi¨®, como si fuera un obrero hablando de su rutinario trabajo, la forma en que seg¨® la garganta de un administrador del Gobierno.
"Hubo un momento en el que pregunt¨¦ por qu¨¦ no me mataban. Me contestaron que el mando hab¨ªa dado instrucciones estrictas de cuidarme bien", se?ala Rees, de 35 a?os, 12 de ellos en la BBC.
Rees se entrevist¨® con el vicecomandante del EIS del sector occidental, uno de los tres en los que se divide el movimiento, y vio un d¨ªa a unos 100 guerrilleros uniformados con metralletas y rifles de asalto AK-47 capturados al Ej¨¦rcito.
En la pel¨ªcula se observa la cooperaci¨®n sobre el terreno entre el EIS y el m¨¢s radical Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA) -al que se considera responsable de la inmensa mayor¨ªa de los asesinatos de extranjeros-. Rees film¨® c¨®mo un convoy de camiones de hombres armados del GIA pasaba a trav¨¦s de una zona controlada por el EIS y era saludado con la V de la victoria. ?l y los dos egipcios de su equipo recogieron tambi¨¦n im¨¢genes de zonas boscosas calcinadas en la regi¨®n de la Cabilia, al este de Argel, que, seg¨²n algunos lugare?os, fueron incendiadas por el Ej¨¦rcito para privar de refugio a la guerrilla. En un pueblo filmaron a miembros de la minor¨ªa bereber que han formado una milicia armada para defenderse de los combatientes integristas.
Rees asegura que se movi¨® por un circuito de unos 200 kil¨®metros en un ¨¢rea totalmente controlada por el EIS al noroeste de Esh Chelif. En el puesto de mando de este grupo en un peque?o pueblo pudo ver mapas de uso militar, un fax y una computadora con listas de v¨ªctimas. En la relaci¨®n figuraba un periodista que Rees hab¨ªa entrevistado d¨ªas antes en la capital.
Los guerrilleros asumen el modelo de los muyahidin afganos, pero se r¨ªen ante la insinuaci¨®n de que reciben ayuda o entrenamiento exterior. Su respuesta es que fueron preparados por el propio Ej¨¦rcito mientras prestaban el servicio militar obligatorio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.