Los colegios agrupados, una alternativa a la escuela rural tradicional
Los problemas de las zonas rurales -la despoblaci¨®n, el envejecimiento progresivo, el deterioro de la convivencia social, la inferior calidad de vida- se reflejan tambi¨¦n en la escuela.La Administraci¨®n trata de paliar esos problemas con los colegios rurales agrupados, conocidos en la jerga administrativa por las siglas CRA: una f¨®rmula con la que se pretende concentrar medios humanos y materiales similares a los de los colegios urbanos para favorecer una mayor calidad y la igualdad de oportunidades.
Para Miguel Alejo, director provincial de Educaci¨®n de Le¨®n, una de las provincias con mayor n¨²mero de CRA, se trata de una v¨ªa alternativa de organizaci¨®n escolar "adaptada a las caracter¨ªsticas geogr¨¢ficas y socioculturales de cada ¨¢mbito rural". Los 50 de Le¨®n atienden, con 874 maestros, a un total de 9.218 alumnos en 333 localidades.
El CRA de la comarca de Laciana tiene sus aulas en siete localidades de la monta?a leonesa: Villager, Caboalles de Arriba, Orallo, Rioscuro, Robles de Laciana, Sosas y Villar de Santiago. En ellas conviven ni?os de diferentes or¨ªgenes: leoneses, portugueses y caboverdianos, en su mayor¨ªa. Sus padres coinciden en la mina y, al igual que en el centro de trabajo, en el colegio existe una perfecta integraci¨®n. En ello parecen coincidir los docentes y las autoridades municipales.
Celestino P¨¦rez, asesor t¨¦cnico del MEC en Le¨®n, considera que despu¨¦s de ocho a?os de la puesta en funcionamiento de los CRA, es ahora cuando est¨¢n remontando el escepticismo inicial de educadores y padres.
En el aula del pueblo de Rioscuro, donde Celestino P¨¦rez aprendi¨® las cuatro reglas y el abecedario, Cochi Garc¨ªa, de 30 a?os, profesora de M¨²sica, muestra a una decena de j¨®venes alumnos el sonido del Oto?o, de Vivaldi. El tutor, Eusebio ?vila, de 36 a?os, tambi¨¦n jefe de estudios del CRA de Laciana, se queja de la falta de instalaciones deportivas y de un tel¨¦fono propio en la escuela y de que la calefacci¨®n, de carb¨®n, a veces funciona de manera deficiente.
Para Guillermo Pinto dos Santos, de origen portugu¨¦s, de 11 a?os, estudiante de sexto de EGB, el acudir a la escuela de Rioscuro en vez de a la de Villablino, a unos tres kil¨®metros de distancia, es una ventaja. "Si fuera al colegio de Villablino me tendr¨ªa que levantar una hora antes".
A la escuela de Robles, construida hace siete a?os, acuden 20 ni?os de entre 3 y 14 a?os. Un profesor itinerante, especialista en problemas infantiles, atiende a uno de ellos. Ese d¨ªa, el fr¨ªo reinante no impidi¨® la clase de gimnasia al aire libre, mientras otra parte de los alumnos participaba en el aula de ingl¨¦s.
Villager de Laciana es la cabecera del CRA. Bernardo Jos¨¦ Madurena, profesor de portugu¨¦s, natural de Braganza (Portugal), explica a sus alumnos a trav¨¦s de un v¨ªdeo algunas de las fiestas tradicionales m¨¢s importantes de su pa¨ªs. La cuarta parte de los alumnos de este centro son de origen portugu¨¦s. Pedro Manuel Machado tiene 12 a?os y estudia 6? de EGB. ?l y sus dos compa?eros P¨ªo Sierra y Miguel ?ngel D¨ªaz, ambos de 10 a?os, se encuentran "muy bien" en la escuela del pueblo.
Ana Mar¨ªa da Cruz da Luz, de 12 a?os, hija de caboverdianos, se?ala a sus tres mejores amigos de entre la docena que compone el aula. "Aqu¨ª me siento a gusto. No tengo problemas. Hago mis deberes y juego", manifiesta.
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