Cinco a?os pol¨¦micos de la joven Universidad de La Coru?a, que cuenta ya con 20.000 alumnos
Meil¨¢n Gil defiende la "independencia"' de su rectorado frente a quienes le acusan de favorecer a promoci¨®n de profesores del Opus Dei
Espa?a se puebla de universidades, que suman ya 52. En los ¨²ltimos cinco a?os se han creado trece, 10 p¨²blicas y 3 privadas. Los decanos de las ense?anzas m¨¢s demandadas se lamentan de la escasez de j¨®venes doctores dispuestos a dedicarse a la docencia ?C¨®mo afrontan la situaci¨®n las nuevas universidades?La de La Coru?a, que cumple su quinto a?o de vida, es una de ellas. Sus dos campus (en La Coru?a y Ferrol) acogen a 20.000. alumnos y unos 800` profesores. "S¨®lo el 30% de ellos son asociados", se?ala el rector, Jos¨¦ Lu¨ªs Meil¨¢n Gil, "y tenemos ya 70 catedr¨¢ticos". Un moderno edificio que fue cuartel del Ej¨¦rcito -en su remodelaci¨®n se invirtieron unos 1.000 millones de pesetas- simboliza el crecimiento de esta joven universidad, que, si en tan poco tiempo ha conseguido afianzar los pilares de su infraestuctura, no acaba de superar la pol¨¦mica sobre su gesti¨®n.
Comprometido con el sector aperturista del franquismo, eterno ministrable durante el Gob¨ªerno de UCI) y brillante jurista, Meil¨¢n Gil est¨¢ convencido de que su gesti¨®n ha contribuido a consolidar la instituci¨®n.
.Elegido por el claustro, con un estrecho margen de votos, en 1990, ha ido increment¨¢ndo su apoyo entre los estamentos universitarios, mientras la oposici¨®n, concentrada en colectivos nacionalistas y pr¨®ximos al PSOE, asegura que est¨¢ montando una Universidad "a su imagen y semejanza". La Confederaci¨®n Intersindical Galega (CIGA) y las asociaciones de alumnos integradas en los Comit¨¦s Abertos de Facultade, presentes, respectivamente, en la junta de personal y en el claustro, le acusan de promover el acceso de docentes vinculados al Opus Dei, organizaci¨®n a la que ¨¦l mismo pertenece. "Criticarme por eso es impresentable es una reacci¨®n antidemocr¨¢tica" ,se defiende, "son cr¨ªticas que obedecen a motivos extraacad¨¦micos. Yo nunca le he preguntado a nadie de d¨®nde viene y si va a misa o no".
Sin ideolog¨ªa
Meil¨¢n, catedr¨¢tico de Derecho Administrativo, abandon¨® su pr¨®spero despacho profesional para aceptar el encargo del Gobierno aut¨®nomo, presidido por Manuel Fraga, de asumir el rectorado. Su antecesor, Jos¨¦ Antonio Portero Molina, nombrado por el PSOE rector -comisario, fue destituido por la Xunta en una pol¨¦mica decisi¨®n. "Aqu¨ª se ha hecho una pol¨ªtica de promoci¨®n del profesorado sin tener en cuenta la ideolog¨ªa de cada uno. Incluso se ha visto favorecida gente de reconocida militancia nacionalista", afirma Meil¨¢n Gil . "Su pol¨ªtica ha sido atemorizar a todas las voces cr¨ªticas y marginar a los centros que no siguen sus dictados", replica el decano de Humanidades Jurjo Torres, su rival en las ¨²ltimas elecciones. Torres acusa a Meil¨¢n de mantener una pol¨ªtica de selecci¨®n de profesorado "totalmente oscurantista". "Desde septiembre de 1993 ten¨ªa que estar aprobada la plantilla docente pero no se ha hecho. No sabemos cu¨¢les son los criterios para sacar las plazas a concurso porque ni siquiera se nos informa de ello en la junta de gobierno".
Las disputas han llegado en ocasiones a los juzgados. El a?o pasado el anterior rector, Jos¨¦ Antonio Portero, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional, recurri¨® sin ¨¦xito al Tribunal Superior de Justicia de Galicia contra la decisi¨®n de Meil¨¢n de excluirle unilateralmente de la presidencia del tribunal que deb¨ªa otorgar otra c¨¢tedra en ese departamento.
Los cr¨ªticos con la gesti¨®n del rector relacionan estas pr¨¢cticas con su supuesto inter¨¦s por promocionar a candidatos del Opus Dei. En algunos centros, como la Escuela Polit¨¦cnica de Ferrol, se ha advertido un discreto desembarco de profesores procedentes de la Universidad de Navarra.
De esa instituci¨®n lleg¨® tambi¨¦n el ex decano de su Facultad de Ciencias de la Informaci¨®n Manuel Casado, que ahora dirige un m¨¢ster de Periodismo en La Coru?a en colaboraci¨®n con un diario local. M¨¢s recientemente, la c¨¢tedra de Derecho Administrativo -cuyo tribunal estuvo presidido por el propio Meil¨¢n- se otorg¨® a Jaime Rodr¨ªguez Arana, director de la Escuela Gallega de Administraci¨®n P¨²blica y miembro del Opus Dei. "Necesitarnos profesores y a nadie le preguntamos de d¨®nde viene", dice el rector, "todas las plazas se cubren por concurso, con un procedimiento' transparente".
"Otelo crey¨® culpable a Desd¨¦mona y la mat¨®"
El curso pasado seis estudiantes lograron matricularse en Derecho, Arquitectura, Inform¨¢tica y en la Polit¨¦cnica Superior en circunstancias que casi provocan una tormenta interna. Los miembros de la junta de Gobierno m¨¢s cr¨ªticos con el rector lo recuerdan indignados.Los estudiantes formalizaron la matr¨ªcula oficial en el mes de abril pese a que, con sus notas de selectividad, ninguno habr¨ªa tenido derecho a acceder a esas carreras. La junta de Gobierno sancion¨® su ingreso con car¨¢cter excepcional tras advertir que "de ahora en adelante se seguir¨¢ el orden establecido, eliminando as¨ª la inquietud social que pueden provocar esos casos".
El m¨¢s discutido fue el de un alumno de Derecho, hijo de un conocido m¨¦dico de Lugo. Hab¨ªa aprobado la selectividad en septiembre y se le otorg¨® el n¨²mero 998 entre todos los aspirantes. El ¨²ltimo alumno admitido ocupaba el n¨²mero 593. Aunque el chico no ten¨ªa la m¨¢s remota posibilidad de conseguir plaza, sigui¨® yendo a clase, present¨¢ndose a los ex¨¢menes e incluso se aloj¨® en una residencia de la universidad. Recurri¨® y en abril el rectorado fall¨® a su favor con el argumento de que negarle la matr¨ªcula le hubiese causado un gran perjuicio despu¨¦s de varios meses integrado de facto en la facultad,
Meil¨¢n recuerda que en el curso anterior se produjo un enorme caos en las tres universidades gallegas, impotentes para organizar el proceso de matriculaci¨®n, que se prolong¨® hasta enero. "Es un asunto discutible", reconoce, "pero esa situaci¨®n desorient¨® a muchas personas. Los chicos hab¨ªan sido admitidos en las clases, pero no le quitaron el puesto a ning¨²n otro." Molesto por este constante goteo de cr¨ªticas a su gesti¨®n, Meil¨¢n acaba refugi¨¢ndose en Shakespeare para quitar importancia a las denuncias: "Reuniendo datos concretos aunque dispersos, Otelo crey¨® culpable a Desd¨¦mona y la mat¨®. Pero Desd¨¦mona era inocente".
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