Las promociones segregadas temen que la fianza haga peligrar las construcciones

La posibilidad de que los 15.000 cooperativistas que a¨²n quedan del proyecto PSV reciban alg¨²n d¨ªa la llave de su vivienda se enfrenta a un nuevo obst¨¢culo: el juez Miguel Moreiras ha declarado a IGS-PSV responsable civil subsidiario para el pago de los 65.000 millones de fianza. El ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, y el diputado de IU-IC Ram¨®n Espasa criticaron ayer la cuant¨ªa de la fianza.Solana la considera "desproporcionada". Espasa cree que es "excesiva" y una muestra del "posicionamiento pol¨ªtico" de Moreiras. "La fianza, al hacer a PSV responsable subsidiario, hace peligrar la construcci¨®n de las casas", asegura Adolfo Alvarado, representante de los cooperativistas de Madrid-Sur.

La indignaci¨®n de Alvarado se apoya en un dato. El lunes, a la vez que Moreiras fijaba una fianza de 65.000 millones de pesetas impuesta a Carlos Sotos y a otros tres antiguos directivos de la cooperativa del sindicato UGT, la promoci¨®n segregada de Madrid-Sur llegaba a un acuerdo con las constructoras para reiniciar las obras el pr¨®ximo d¨ªa 15. Despu¨¦s, explica que terminaron de pagar las letras en febrero y que prev¨¦n concluir unas 300 viviendas en cuatro meses y las restantes -de las ya iniciadas- en 10 meses.Declarar a PSV responsable subsidiario es, en opini¨®n de Jos¨¦ Luis Aramburu, de la asociaci¨®n Ascova de Valdebernardo, "una aberraci¨®n que s¨®lo garantiza el derecho de unos pocos que quieren abandonar su vivienda". Su representante, Juan Ram¨®n Montero, de la Asociaci¨®n de los Dados de Baja, se apresur¨® el lunes a respaldar la decisi¨®n de Miguel Moreiras.

Juli¨¢n Mart¨ªn, presidente de la federaci¨®n de Asociaciones de Cooperativas y portavoz de las promociones segregadas, se suma a los cr¨ªticos. "No se pueden defender los intereses de los cooperativistas a costa de los propios cooperativistas", afirm¨® ayer. Por ello, esperan que hoy "el juez matice o explique qu¨¦ implica la responsabilidad subsidiaria de PSV". Ma?ana decidir¨¢n que acciones tomar, entre las que no descartan personarse en contra de la decisi¨®n de Moreiras. Tal como entienden el auto, ¨¦ste paraliza las promociones que ya est¨¢n en marcha y amenaza seriamente el proyecto. Es la respuesta de los cooperativistas que ve¨ªan una puerta abierta tras el proyecto de segregaci¨®n de PSV en 70 peque?as cooperativas y que ya han visto colocar m¨¢s de un ladrillo. Hasta ahora se han segregado 25 cooperativas (v¨¦ase cuadro) que agrupan a unos 3.000 socios. Estos han aceptado la derrama del 7% que ronda entre las 700.000 pesetas y el mill¨®n de m¨¢s) para reiniciar las construcciones.

El problema es que de las 19.282 viviendas comprometidas por PSV con sus socios s¨®lo quedan vivos (no se han dado de baja) unos 15.000. ?stos han aportado 35.000 millones de pesetas para la construcci¨®n de sus viviendas. Las obras con este fin, mientras, est¨¢n a medias alrededor de 2.850 viviendas, a lo que hay que sumar las casi 1.400 que ya se han entregado. Las restantes no han visto ni un ladrillo