Mic¨®logos de fin de semana
El centro de informaci¨®n del parque de Pe?alara presta cestas y aconseja a los cazadores de setas
Los d¨ªas de setas han llegado como cada oto?o. Con la ca¨ªda de las primeras lluvias, los bosques florecen de nuevo con colores y vol¨²menes sorprendentes. La segunda primavera, que marca el m¨¢ximo esplendor de hongos, l¨ªquenes y musgos, tambi¨¦n abre la veda para los cazadores de setas. Una exposici¨®n did¨¢ctica instalada en el centro de informaci¨®n del Parque Natural de Pe?alara, en Rascafr¨ªa (1.401 habitantes), convierte a los excursionistas domingueros en responsables y ecologistas buscadores de n¨ªscalos, champi?ones o setas de cardo.No se trata de convertir a nadie en un experto mic¨®logo (estudioso de los hongos). En las sencillas instalaciones situadas frente al monasterio de El Paular se dan unos consejos pr¨¢cticos para esquivar riesgos y para no da?ar los fr¨¢giles ecosistemas del valle del Lozoya. Incluso all¨ª funciona un original servicio de pr¨¦stamo de cestas de mimbre para transportar estas viandas gratuitas como el paladar se merece.
En el edificio, una enorme seta con rasgos de tebeo advierte desde un cartel: "Si no me conoces, ?no me toques!". No es una fanfarroner¨ªa. El misterioso reino de los hongos ofrece algunos de los venenos m¨¢s poderosos de la naturaleza. Dentro, un prospecto recuerda que, ya en el a?o 54 despu¨¦s de Cristo, Agripina envenen¨® con una Amanita phalloides a su marido, el televisivo Claudio, para que le sucediese Ner¨®n.
"Yo quer¨ªa apuntarme a un deporte de aventura, pero s¨®lo quedaban dos opciones: "escalada en roca resbaladiza a pie desnudo" o "setas", bromea con el posible riesgo Manuel Medina, integrante de una de las excursiones de la Campa?a de Oto?o que organiza la Direcci¨®n General de la Juventud de la Comunidad. Por 2.500 pesetas, este estudiante de econ¨®micas de 23 a?os ha convivido dos d¨ªas en el cercano albergue de Los Batanes con otros 20 j¨®venes y tres monitores que les han asesorado en sucesivas excursiones cineg¨¦ticas.
Los cazadores de setas aterrizaron en el centro de informaci¨®n sobre las dos de la tarde de ayer. Mojados y junto a otros buscadores "de por libre", llegaban para devolver las cestas y conocer m¨¢s detalles sobre los ejemplares apresados a lo largo de la ma?ana, bonitos aunque no tan grandes como las enormes macrolepiotas recogidas el s¨¢bado. En el interior del centro, Nuria Preciado, una bi¨®loga del Parque de Pe?alara, les ayudaba a utilizar las gu¨ªas de identificaci¨®n. Preciado tambi¨¦n advirti¨® que el centro no va a estar mucho tiempo abierto porque con la legada del fr¨ªo se acabar¨¢ la temporada de setas. Entonces, ella volver¨¢ a sus estudios sobre la agresividad del vis¨®n americano.
Con las botas llenas de barro y cansado por la aventura, ?ngel Sim¨®n se quejaba del mal sabor de un ejemplar: "Una Tremella no s¨¦ qu¨¦, que tiene aspecto de babosa". Sin embargo, este joven de Torrej¨®n se mostraba muy satisfecho con su ejemplar de Amanita muscaria, "la venenosa [leve] seta roja con pintitas blancas" utilizada tradicionalmente como vivienda por los gnomos. La de ?ngel no ten¨ªa inquilino.
Centro de informaci¨®n del Parque Natural de Pe?alara. Rascafr¨ªa. Kil¨®metro 25 de la carretera M-604 (frente al monasterio de El Paular). M¨¢s informaci¨®n sobre setas: Real Jard¨ªn Bot¨¢nico. Cuesta de Moyano, 1. Clasificaci¨®n y consultas: lunes de 19.00 a 22.00.
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