Frenazo a ETA en la antesala de una ofensiva
La captura en Tol¨®n (Francia) del supuesto m¨¢ximo responsable del aparato militar de ETA, F¨¦lix Alberto L¨®pez de la Calle, Mobutu, y de otros activistas liberados se ha producido en un momento en el que la organizaci¨®n terrorista daba por concluida su ¨²ltima reestructuraci¨®n interna y se dispon¨ªa a desencadenar una serie de atentados de gran envergadura. Tal y como se deduce repasando la historia de, este grupo terrorista, existe una relaci¨®n de causa y efecto entre la fortaleza de ETA, o la confianza subjetiva en su mismo poder¨ªo, y el peso e implantaci¨®n en su seno de las posiciones mas inmovilistas e intransigentes. De la misma manera que quienes nunca han deseado otra salida dialogada que la sublimaci¨®n de sus sue?os de victoria esgrimen peri¨®dicamente el supremo argumento de "¨²nicamente se puede negociar desde una posici¨®n de fuerza" cada vez que la realidad toca a las puertas de la organizaci¨®n terrorista.
,La hip¨®tesis de que ETA se encontraba en la antesala de lo que en ' su lenguaje preferido define como una ofensiva destinada a la acumulaci¨®n de fuerzas est¨¢ avalada no s¨®lo por los datos, escritos intervenidos y declaraciones de detenidos reunidos por las polic¨ªas a lo largo de los ¨²ltimos meses, sino tambi¨¦n por las transparentes declaraciones de algunos de los m¨¢s significados dirigentes de Herri Batasuna (HB) y por el mismo rumbo adoptado por esta formaci¨®n.
Congelada la reinserci¨®n en las c¨¢rceles, recuperada en los ¨²ltimos comicios una parte de los votos perdidos, la direcci¨®n de ETA parec¨ªa dispuesta a acelerar el proceso con atentados contundentes y m¨¢s selectivos para sobreponerse, por la v¨ªa de los hechos y del discurso de las armas, en el debate interno y despejar la duda, tantas veces interrelacionada, sobre la fortaleza y la utilidad actual de la eufem¨ªsticamente denominada lucha armada.
Una permanente huida hacia adelante que, en el espejismo de la recuperaci¨®n organizativa o de la mejor¨ªa de la coyuntura, reh¨²ye sistem¨¢ticamente la confrontaci¨®n con la realidad del debilitamiento general y progresivo en casi todos los ¨®rdenes.
Organizaci¨®n de 'aparatos' estancos
La estructura de la organizaci¨®n terrorista se compone de cuatro aparatos: captaci¨®n de activistas, informaci¨®n, miembros legales y comandos ilegales. Estos cuatro departamentos est¨¢n r¨ªgidamente aislados para evitar que la ca¨ªda de los integrantes de uno de ellos acarree la de los dem¨¢s.
La detenci¨®n en el sureste franc¨¦s de Mobutu y de otros activistas del aparato militar y del de informaci¨®n muestra, por lo dem¨¢s, que ETA extrajo como conclusi¨®n,de la ca¨ªda del colectivo Artapalo en Bidart (Francia), hace dos a?os, la necesidad de que la direcci¨®n se dispersara y buscara territorios mucho m¨¢s alejados de la frontera.
' Aunque, de acuerdo con la organizaci¨®n. interna, las funciones del jefe militar detenido deben ser ahora asumidas autom¨¢ticamente por un sustituto previamente designado en previsi¨®n de estas contingencias, el efecto de la operaci¨®n de Tol¨®n debe trastocar, sin duda, buena parte de la estructura, sobre todo si, como se indica, la polic¨ªa se ha apoderado de valiosa informaci¨®n.
Con todo, el trabajo de reestructuraci¨®n iniciado tras, el desmantelamiento de la anterior direcci¨®n ha permitido a ETA reconstruir parcialmente sus conductos internos y recomponer tres comandos de liberados -el de Vizcaya, desarticulado ayer, el de Guip¨²zcoa, tan desconcertante en sus apariciones, y el de Madrid, responsable del asesinato del general Francisco Veguillas-, as¨ª como varios de legales (formados por elementos no fichados). Precisamente, la mayor¨ªa de los, grupos legales est¨¢n organizados en un aparato propio, te¨®ricamente separados de los liberados y coordinados, seg¨²n la polic¨ªa, por un responsable que se identificaba ante ellos como Amboto, el monte de Durango (Vizcaya), escenario de referencia en la leyenda vasca.
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