El Rayo se parte en el ¨²ltimo instante
Los de Vallecas agrietaron el muro del ?ibar, pero dejaron escapar un punto
La labor fue ardua, de ingeniero con nota. Agrietar el muro del ?ibar es una misi¨®n de tremenda laboriosidad. No s¨®lo para el Rayo, sino para todo hijo de vecino que milita en Segunda Divisi¨®n y tiembla cuando ve en el calendario que les visita el ?ibar, siempre con su muro defensivo a cuestas. Por algo es el conjunto que m¨¢s temporadas suma en la Segunda Divisi¨®n. Transcurrido el primer tiempo, nadie daba un duro por la consecuci¨®n de tan complicada misi¨®n. "Es imposible marcar un gol a estos t¨ªos", se?alaba un aficionado local. Pero en la continuaci¨®n, el Rayo vio una grieta en el muro. Por all¨ª pas¨® y todo parec¨ªa solucionado. Eso se creyeron. En los ¨²ltimos cinco minutos, los vascos demostraron que tambi¨¦n saben salir de su trinchera. En dos arreones, con la defensa madrile?a dormida, dejaron al Rayo con un negativo.Alg¨²n ojeador del ?ibar debi¨® seguir con atenci¨®n la gira de hace unos a?os del grupo de rock Pink Floyd. Bajo el nombre de The wall (El muro), un alba?il iba levantando una muralla en el escenario mientras el grupo iba desgranando canciones. El planteamiento del ?ibar es similar. S¨®lo var¨ªa una cosa: el muro se construye antes de que comience el espect¨¢culo, en el vestuario. La consigna es: "Todos a defender". El arma del Rayo para derribar el muro era On¨¦simo. Sus continuos caracoleos, se tendr¨ªan que encontrar con alguna pierna enemiga. Solo faltaba que el ¨¢rbitro pitar¨¢ el penalti. As¨ª fue. Antes, otra jugada a bal¨®n parado, que culmin¨® con un gol en propia meta, abri¨® la primera grieta. Aquello estaba solucionado. Los alba?iles del ?ibar no hab¨ªan realizado su trabajo con la eficacia de otras veces. Faltaban cinco minutos y el Rayo decidi¨® irse a tomar el aperitivo. Fatal decisi¨®n. En dos jugadas trenzadas del ?ibar lleg¨® el empate.
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