M¨¢s ecuanimidad

Est¨¢ visto que nuestro director de cine Jos¨¦ Luis Garci no tiene suerte con su peri¨®dico. Si obtiene un Oscar, como ocurri¨® en 1982, se trata de "un Oscar menor", seg¨²n titul¨® un editorial de su diario de imborrable recuerdo. Si obtiene este a?o la nominaci¨®n de la Academia Espa?ola, su cuarta nominaci¨®n, y representar¨¢ al cine espa?ol en Hollywood, es porque "se ha llevado tan comercial marchamo -Canci¨®n de cuna acaba de ser reestrenada casi coincidiendo con su selecci¨®n- con simples pr¨¢cticas de captaci¨®n de voto, ins¨®litas hasta la fecha, en el tinglado del cine espa?ol", seg¨²n opini¨®n de Mart¨ª Font.Siempre el s¨ª, pero... Siempre la peque?a mezquindad. Siempre la peque?a maldad. Siempre la falta de generosidad hacia la obra de Garci. Las pel¨ªculas de Garci pueden gustar m¨¢s o menos, pueden y deben ser criticadas desde los valores cinematogr¨¢ficos, pero a m¨ª empieza a resultarme inquietante que el Oscar, cuando ¨¦l lo gana, se torne menor, o la nominaci¨®n, cuando ¨¦l la recibe, "en el fondo no sean m¨¢s que t¨¦cnicas comerciales". Ni la Academia Espa?ola de Cine, ni la Academia de Hollywood, ni sus lectores, entre los que me cuento desde el nacimiento del peri¨®dico, somos; as¨ª de simplones.

Como lectora de su peri¨®dico, reclamo de EL PA?S ecuanimidad, generosidad y seriedad hacia uno de los directores m¨¢s sobresalientes del cine espa?ol, que figura con pleno derecho en los anales de la meca del cine y que con Canci¨®n de cuna ha hecho una de las apuestas cinematogr¨¢ficas m¨¢s arriesgadas de la actual cartelera espa?ola. Sinceramente, creo que Garci se merece otro trato de un peri¨®dico de la solvencia del que usted dirige.-