Sentido adi¨®s a Mitterrand
I. C. / X. V-.F. Se supon¨ªa que la primera cumbre europea de la Alemania unificada se celebrar¨ªa en alg¨²n lugar de la antigua Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana. No fue as¨ª. El canciller Helmut Kohl debi¨® considerar que una ciudad que fue la capital del carb¨®n y del acero y que a¨²n padece los efectos de la reconversi¨®n industrial -su tasa de paro del 12,4% supera con creces la media nacional- se merec¨ªa poder acoger el Consejo Europeo. Essen pasar¨¢, adem¨¢s, como la ciudad donde el presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand, asisti¨® a la ¨²ltima cumbre de la Uni¨®n Europea y se despidi¨® de sus colegas que le dijeron adi¨®s c¨¢lidamente. "Sin usted no estar¨ªamos ahora d¨®nde estamos", le manifest¨® Roman Herzog, el presidente alem¨¢n.
Con sus 650.000 habitantes, Essen, en el coraz¨®n de la Ruhr, no re¨²ne acaso las condiciones ideales para organizar tal evento. Faltan, por ejemplo, infrastructuras hoteleras. El presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand, ha tenido que ser alojado en una mansi¨®n en las afueras que perteneci¨® a los Thyssen, mientras su hom¨®logo finland¨¦s, Martti Ahtisaari, se hospeda en un mero hotel de cuatro estrellas frente a la estaci¨®n de trenes. A Felipe Gonz¨¢lez le ha tocado uno de lujo.
A diferencia de lo que ha sido la presidencia alemana, salpicada de fallos a causa de las interferencias provocadas por las elecciones generales, la cumbre est¨¢ magn¨ªficamente organizada en el recinto ferial de la ciudad. El Estado federal y la comarca del Ruhr no han reparado en gastos a la hora de decorar el recinto con motivos navide?os y de contratar coros y orquestas para animar la fiesta regada con los mejores blancos alemanes.
Discurso de despedida
La alegr¨ªa de la fiesta no borr¨® el toque sentimental. Lo di¨® el presidente alem¨¢n en el discurso que pronunci¨® al t¨¦rmino del almuerzo que ofreci¨® a los jefes de Estado y de Gobierno en el castillo de Hugenpost. Aprovech¨® la ocasi¨®n para despedirse a la vez de Mitterrand, que dejar¨¢ el El¨ªseo en mayo si su enfermedad le permite seguir gobernando hasta entonces, y del presidente de la Comisi¨®n Europea, Jacques Delors, que cesar¨¢ el mes pr¨®ximo.
"Sin usted no estar¨ªamos ahora d¨®nde estamos", dijo Herzog. "Saludo en el presidente de la Rep¨²blica francesa a un aut¨¦ntico patriota franc¨¦s y europeo y le agradezco en nombre de todos su incansable compromiso con Europa". Y concluy¨®: "Ha fortalecido, adem¨¢s, uno de los principales pilares de la unidad europea: la amistad franco-alemana". Tambi¨¦n tuvo palabras amables para Delors de quien, dijo: "Se merece todo nuestro agradecimiento por su labor siempre comprometida con Europa".
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