Arantxa ser¨¢ n¨²mero uno del mundo el d¨ªa 6
Arantxa S¨¢nchez Vicario, de 23 a?os, desbancar¨¢ a Steffli Graf del liderato del tenis femenino mundial el pr¨®ximo lunes, d¨ªa 6 de febrero. Arantxa llega a la cumbre mundial por m¨¦ritos propios y tras muchos a?os de un trabajo duro y continuado. Sin embargo, su mandato coincidir¨¢ con un momento realmente controvertido y hasta cr¨ªtico del WTA Tour.En Australia, algunas voces han clamado a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n por el hecho (le que las chicas obtengan los mismos premios que los hombres en los grandes torneos. La misma Arantxa fue interrogada sobre la justicia o no de que Naoko Sawamatsu percibiera el mismo tal¨®n que Jim Courier, que hab¨ªa agotado las cinco mangas ante Sampras, por perder en cuartos de final -47.000 d¨®lares (6,1 millones de pesetas)-. La espa?ola fue inteligente y diplom¨¢tica: "Preg¨²nteselo al director del torneo".
Esa es una vieja y ya caduca cuesti¨®n. Pero hay otros aspectos mucho m¨¢s preocupantes. Algunas agencias de informaci¨®n explican desde Melbourne que los organizadores del Open de Australia han empezado a trabajar desesperadamente para conseguir la participaci¨®n de Steffi Graf o el retorno de Monica Seles el pr¨®ximo a?o. Su opini¨®n es que el circuito actual est¨¢ falto del carisma de aquellas dos jugadoras.
La calidad de Arantxa
Eso es obvio. Pero ser¨ªa una tremenda injusticia cuestionar ahora la calidad de Arantxa y argumentar que es n¨²mero uno por la ausencia de Graf y Seles. Es cierto que Steffi lleva sin jugar casi cinco meses. Y tambi¨¦n lo es que si hubiera jugado en Australia, la proclamaci¨®n de la espa?ola se habr¨ªa retrasado. Pero no hay que olvidar que dos de los mejores ¨¦xitos de Arantxa los logr¨® precisamente ganando a Graf -finales de Roland Garros 89 y del Open de EE UU 94.
Lo que nadie puede discutir es que, hoy por hoy, el carisma de Graf o el de Seles -aunque retlrada desde abril de 1993 tras ser apu?alada- sigue siendo superior al de Arantxa, Conchita, Mary Pierce o Jana Novotna, las cuatro jugadoras que ahora mandan en el circuito.
En cuanto a juego, Arantxa tiene poco o nada que envidiar actualmente a Graf o a Seles. Es una n¨²mero uno con peso espec¨ªfico y puede consolidarse en esta posici¨®n. Pero la salvaci¨®n del circuito parece pasar, incluso seg¨²n algunas voces internas, por la recuperaci¨®n de aIgunos rostros j¨®venes, la vuelta de Graf a la competici¨®n y el cada vez m¨¢s cuestionado retorno de Seles.
El WTA Tour est¨¢ en crisis. No ha logrado encontrar un patrocinador que sustituya a Kraft ni a otro que financie el Masters como hac¨ªa Virginia Slim's. Su audiencia televisiva est¨¢ bajando y el inter¨¦s por los torneos femeninos est¨¢ disminuyendo. Pero algunos de estos aspectos pueden extrapolarse tambi¨¦n al circuito masculino. Tal vez lo que debe revisarse es toda la estructura del tenis actual.
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