El nuevo edificio de tiendas de Serrano duplicar¨¢ la oferta comercial de la zona

La arteria comercial de lujo, por excelencia de Madrid, la calle de Serrano, ver¨¢ duplicada su oferta de tiendas cuando se inaugure el pr¨®ximo oto?o la galer¨ªa que se est¨¢ construyendo actualmente en los dos edificios anejos que fueron sede del peri¨®dico Abc. La instalaci¨®n dispondr¨¢ de 14.000 metros cuadrados, destinados a todo tipo de tiendas, que visitar¨¢n, seg¨²n las previsiones, 20.000 personas al d¨ªa. El complejo llegar¨¢ con a?o y medio de retraso, justo el tiempo en el que sus obras estuvieron paralizadas por la crisis de Banesto, entidad encargada de financiar el proyecto.

Los c¨¢lculos de la consultora Larry Smith & Durco calculan que en el cogollito de Serrano -de Juan Bravo a la puerta de Alcal¨¢-, hay, aproximadamente, un centenar de tiendas en un kil¨®metro y medio. Recorrer la oferta del futuro centro comercial sumar¨¢ la misma distancia y aportar¨¢ tantos locales como en el trayecto tradicional, entre 80 y 100. Cada hora, 1.812 personas pisan con garbo ese eje y, muchas, para ir de compras. El 75% de ellas no reside en esa zona; y los d¨ªas laborables el 37% llega en autob¨²s, el 30,5% utiliza el coche particular y casi una cuarta parte el metro.El arquitecto Marlano Bay¨®n y el equipo de t¨¦cnicos de la empresa promotora Plataforma 61 se encargan de la adaptaci¨®n de lo que fue la antigua sede del diario Abc. El edificio situado en el n¨²mero 61 de la calle de Serrano fue proyectado por Jos¨¦ L¨®pez Sallaberry en 1899 y, en 1926, An¨ªbal Gonz¨¢lez dise?¨® el que albergaba las rotativas, cuya fachada da al Paseo de la Castellana, aunque lo firme como responsable global Teodoro Anasagasti. Este insigne arquitecto s¨ª es responsable por completo del tercer cuerpo del complejo, construido en ladrillo, que data de principios de los a?os treinta y est¨¢ inspirado en los edificios racionalistas del Chicago de Richard Sullivan y cuyas ¨²ltimas plantas se destinar¨¢n a oficinas.

Adem¨¢s de las oficinas y las tiendas, el centro tendr¨¢ un espacio dedicado exclusivamente a bares y restaurantes con acceso directo desde la calle. Estos negocios ocupar¨¢n, entre otros rincones, la sala de baile que fue el lugar que alberg¨® la primera Redacci¨®n. El tejado del edificio cuya fachada da a la Castellana se ha convertido en una privilegiada terraza para restaurantes y bares de copas, y cuyo elemento estrella es el templete con columnas de alabastro coronadas por una veleta que embriaga de esp¨ªritu sevillano la zona del Paseo de la Castellana sobre la que se asoma.

El proyecto se remonta a la d¨¦cada de los a?os ochenta, cuando la promotora Plataforma 61, cuyo consejero delegado es Jos¨¦ Antonio Zapata, empresario del sector inmobiliario, compr¨® el edificio por 3.000 millones, seg¨²n informa Fernando Ramos, vicepresidente de Larry Smith & Durco, consultor¨ªa encargada de comercializar el centro y gestionarlo en el futuro.

La obra civil, en primavera

Aunque las, obras comenzaron a principios de 1991, quedaron paralizadas desde la primavera de 1993 hasta septiembre de 1994 por las inevitables repercusiones de la crisis de Banesto, seg¨²n a?ade Ramos. Agroman retorna la paleta en septiembre, del a?o pasado cuando el nuevo equipo de Banesto decide seguir adelante con la financiaci¨®n de un proyecto de 14.000 millones.

La obra civil se acabar¨¢ la pr¨®xima primavera y, desde ese, momento hasta la inauguraci¨®n, que se producir¨¢ en septiembre u octubre, se abordar¨¢n las modificaciones necesarias para poner en marcha cada local alquilado cuyo tama?o puede oscilar entre 40 y 2.000 metros cuadrados.

Adem¨¢s de los 14.000 metros cuadrados de superficie alquilable bruta, cuenta con 7.000 metros cuadrados destinados a oficinas y 9.300 metros cuadrados de aparcamiento, con capacidad para medio millar de plazas de garaje, cuya entrada y salida se realizar¨¢ por el Paseo de la Castellana. La galer¨ªa dar¨¢ trabajo a m¨¢s de 300 personas.