Zeffirelli :"No gusto a los cr¨ªticos por que no soy Almod¨®var "

En Italia le apodaron Doctor Jeckyll y M¨ªster Hyde. Franco Zeffirelli (Florencia, 1924) es capaz de aproximarse a Puccini con sutileza y, al mismo tiempo, reclamar la pena de muerte para las abortistas. ?Esquizofrenia art¨ªstica? "No hay dos Zeffirellis. Yo soy coherente" dice. Tambi¨¦n pretende triturar leyendas diciendo que su mentor art¨ªstico, Visconti, era un reaccionario. Y asegura que no gusta a los cr¨ªticos porque no es Pedro Almod¨®var.

A sus 71 a?os, Zeffirelli, que anoche mostr¨® en el Teatro de la Maestranza de Sevilla su legendario montaje puntilloso y verista para La boh¨¨me de Puccini, ideado por ¨¦l hace ya 30 a?os, dice sentirse "m¨¢s moderno que cuando era joven".Juega h¨¢bil y relajadamente con su fama de creador profundamente integrista que, desde marzo. pasado, es adem¨¢s senador por la alternativa de Silvio Berlusconi. Aunque advierte: "La cr¨ªtica de izquierdas me ha hecho pagar un alto precio por expresar mis opiniones, hasta convertirme en' una especie de diablo al que hab¨ªa que hostigar a toda costa". Luego apostilla sonriente: "Aqu¨ª estoy. Les he vencido".

. Entonces, ?por qu¨¦ la' gente cree que Zeffirelli es una especie de portavoz vaticano para asuntos cinematogr¨¢ficos y l¨ªricos? "Ni idea. Con mi arte nunca he hecho propaganda. ?Es la m¨ªa una voz cristiana? No estoy seguro, pero ojal¨¢ lo fuera. S¨®lo he hecho dos pel¨ªculas religiosas -Hermano Sol, hermana Luna y. Jes¨²s de Nazareth- y, bueno, yo no soy Tarantino: supongo que tengo una especie de mirada religiosa. Sin embargo, la cr¨ªtica me conjura como al diablo. No les gusto porque no soy Almod¨®var. S¨ª, conozco su cine. Desgraciadamente", dice.

Seguidores perplejos

El cineasta y escen¨®grafo simula estar harto de ser asociado con las trincheras integristas. Pero' hay razones: en los ¨²ltimos a?os, Zeffirelli ha pedido la pena de muerte contra los abortistas, los corruptos y contra todo aquel que lastime a los animales. Muchos de sus seguidores quedaron confundidos o perplejos: el disc¨ªpulo m¨¢s directo de Visconti, el ¨²ltimo arist¨®crata marxista, se autonombraba "conservador iluminado"

"Visconti era un liberal aristocr¨¢tico y totalitario. Lo m¨¢s que ten¨ªa de izquierdas era la suela del zapato. Excepto La terra trema y Rocco y sus hermanos, todo su cine es decadente. Era un reaccionario. Como Fellini. Yo estoy mucho m¨¢s a la izquierda que Visconti", dice Zeffirelli sobre el director de El gatopardo.

Y sobre Berlusconi anuncia:"Volver¨¢. Es un gran hombre. Y ganaremos". En el Senado romano, Zeffirelli dice ser el ¨²nico intelectual que queda enfangado con la pol¨ªtica. "Como no existe la izquierda, ?qu¨¦ iban a contarnos sus intelectuales? Ni son revolucionarios ni son creadores ni tienen una visi¨®n proletaria de la vida. Por fortuna, han huido".

Tras este diagn¨®stico pol¨ªtico, Zefirelli, que trabaj¨® con Maria Callas, Renata Tebaldi, Luchino Visconti, Furtwangler y Herbert von Karajan, entre otros, y trat¨® con las grandes divas en las d¨¦cadas doradas de la l¨ªrica, suspira por la gloria de su pasado y dibuja la desolaci¨®n de su autorretrato: "Yo, que guardo los tesoros del pasado, soy un puente entre dos generaciones: una de oro y otra de mierda: la nueva".

Pese a ello, el cristiano Zeffirelli, que ya prepara una Carmen que se ver¨¢ en julio en Verona, anida esperanzas y, contra la autopsia aireada por el escen¨®grafo Patrice Ch¨¨reau, proclama: "La ¨®pera est¨¢ viva".