Trueba rueda en las calles de Miami
Daryl Hannah, Melanie Griffith y Antonio Banderas act¨²an en el filme
ENVIADA ESPECIALDaryl Hannah sale enfadada de una galer¨ªa de arte de Miami Beach. Detr¨¢s, resuelto a no perderla, corre Antonio Banderas. Discuten en medio de la calle; ella, muy p¨¢lida, le echa en cara su falta de escr¨²pulos; ¨¦l, un apasionado latino, se defiende y la intenta retener. Finalmente, los labios de Daryl Hannah buscan los de Antonio Banderas. Al fondo, un grupo de jazz, formado por Michael Camino, al piano; Ismael L¨®pez Cachao, en el contrabajo, y Paquito Rivera, con el saxo, interpretan en directo la canci¨®n Caribe.
A Fernando Trueba, el director espa?ol ganador de un Oscar el a?o pasado por Belle ¨¦poque, se le ve¨ªa feliz la noche del jueves en la ciudad de- Florida, donde cumpl¨ªa el sue?o de dirigir una comedia americana. Two much, su primera incursi¨®n en Estados Unidos y la m¨¢s ambiciosa producci¨®n de la historia del cine espa?ol, re¨²ne por primera vez a aut¨¦nticas estrellas de Hollywood americanas, como Melanie Griffith, Daryl Hannah y Danny Aiello, y a otra espa?ola, el actor malague?o Antonio Banderas. Gabino Diego pone el acento cubano en el filme.
Basado en el libro del norteamericano Donald Westlake, editado en Espa?a por la editorial J¨²car con el t¨ªtulo de Un gemelo singular, Two much es un proyecto anterior a la exitosa pel¨ªcula de Fernando Trueba Belle ¨¦poque. Con gui¨®n del propio Trueba y de su hermano David y el guardaespaldas ling¨¹¨ªstico del ingl¨¦s de Paul Diamond -hijo bel guionista de El apartamento y Con faldas y a lo loco-, Two much es un ambicioso proyecto espa?ol de 13 millones de d¨®lares (unos 1.700 millones de pesetas) producido a partes iguales por Fernando Trueba P. C., L¨®la Films (de Andr¨¦s Vicente G¨®mez) y Sogetel. El rodaje del filme, realizado ¨ªntegramente, en ingl¨¦s y en Miami y alrededores, tendr¨¢ una duraci¨®n de 10 semanas, de las que ya se han realizado tres.
Two much, de cuya obra original queda ¨²nicamente la idea central, narra la historia de Art (Antonio Banderas), un pintor buscavidas y p¨ªcaro due?o de una galer¨ªa de arte que liga con Betty Kerner, una rica y exc¨¦ntrica mujer (Melanie Griffith) relacionada con mafiosos. Cuando Art, despu¨¦s de una noche paradisiaca con Betty, conoce a la hermana de esta, Liz (Daryl Hannah), se enamora perdidamente de ella, para lo que se inventa un hermano gemelo.
El reparto del filme se completa con Danny Aiello, en el, papel de rom¨¢ntico g¨¢nster casado y divorciado dos veces de Melanie Griffith; Eli Wallach, en el personaje maravilloso, de padre de Antonio Banderas, antiguo combatiente de la Brigada Lincoln en la guerra civil espa?ola; Joan Cusak, la secretaria de Antonio Banderas, que termina enamorada de Gabino Diego, un pintor cubano amigo del protagonista.
La esquina de la avenida Euclid y la calle Lincoln, en Miami, la ciudad de la tercera edad millonaria norteamericana, ha sido el escenario, la semana pasada, del rodaje del filme espa?ol Two much. Grandes roulottes ocupaban una de las calles paralelas, en uno de cuyos extremos se mont¨® una gran carpa de comedor. El jueves, decenas de americanos, cargados de walkie-talkies, se entremezclaban y daban ¨®rdenes a los extras preparados a ambos lados de la calle peatonal, mientras dos miembros de la polic¨ªa de Miami, uniformados de riguroso negro y sin que les faltara ning¨²n detalle armament¨ªstico en sus cinturas, vigilaban y controlaban a los curiosos que, aun siendo noche cerrada, acudieron en masa a ver en directo a sus estrellas. En medio de la peatonal Linco1n estaba listo el escenario para la actuaci¨®n en directo de un grupo de m¨²sicos. Todo est¨¢ preparado para una jornada de 11 horas de trabajo que se inicia a las siete de la tarde, hora de Miami, y finaliza con las primeras luces del viernes, a las seis de la ma?ana.
Llegan casi al tiempo la actriz, Daryl Hannah, con pantalones vaqueros y una chaqueta azul marino de Calvin Klein sobre blusa blanca, y Antonio Banderas, hecho un dandy con el pelo recogido en coleta. Fernando Trueba les esperaba relajado desde minutos antes. La acristalada galer¨ªa de arte, donde se iniciar¨¢ el rodaje de la jornada, se desaloja de extras para dejar al director y los actores hablar relajadamente y solos acerca de la escena a ensayar, algo que repiten a lo largo de toda la noche sin perder las buenas maneras y la camarader¨ªa. Una camarader¨ªa que no se ha perdido -"yo soy una persona muy d¨¦bil de car¨¢cter para dirigir filmes, hay gente qqe sabe manejar situaciones dif¨ªciles, pero yo, cuando hay conflictos me vengo abajo, s¨®lo s¨¦ trabajar en armon¨ªa, amistad y,complicidad", se justifica el director-, a pesar de la abultada n¨®mina, a lo grande, como todo lo norteamericano, que ha sido necesaria para realizar esta producci¨®n.
Un total de 110 personas trabajando en el equipo t¨¦cnico del filme, de los que s¨®lo ocho son espa?oles, dos franceses, y el resto, americanos. Junto a Fernando Trueba trabaja parte del equipo que hizo posible el ¨¦xito de Belle ¨¦poque: Jos¨¦ Luis Alcaine, fotograf¨ªa; Cristina Huete, productora ejecutiva; Juan Botella, decorador, y Lala Huete, vestuario. Javier Chinchilla, ayudante de direcci¨®n, y Ang¨¦lica Huete, directora de producci¨®n, completan la plantilla espa?ola.
"Cuidado con lo que sue?as, no vaya a ser que. lo consigas". Con este refr¨¢n, Fernando Trueba, que ha cumplido los m¨ªticos 40 a?os en enero pasado, intenta explicar, en un descanso del rodaje, las sensaciones que le embargan en su aventura americana. "La verdad es que hay que ser unos inconscientes y unos dementes, para estar haciendo lo que estamos haciendo. S¨®lo el tiempo dir¨¢ si vale la pena hacer estas cosas", dice el director, para quien esta pel¨ªcula es producto del azar y la testarudez, "que son las ¨²nicas cosas que funcionan en el mundo".
Todos hablan de las dificultades que se han encontrado a la hora de trabajar en Estados Unidos, pero nadie pronuncia la palabra arrepentimiento. "Cuando pensamos en las facilidades y el dinero que damos nosotros a los americanos cuando trabajan en nuestro pa¨ªs", reflexiona en voz alta Trueba. A su lado, su mujer, Cristina Huete, que sue?a con la llegada de su hijo Jon¨¢s, de 13 a?os, la semana pr¨®xima para achucharle, desgrana las dificultades de la producci¨®n.
"Es una diferencia abismal con el trabajo en Espa?a. Aqu¨ª hay que lidiar y negociar con los poderos¨ªsimos sindicatos de actores, t¨¦cnicos, conductores, maquilladores, que obligan a trabajar con un gran equipo. Lo que en Espa?a hace una persona, aqu¨ª lo hacen cinco. Este mismo rodaje en nuestro pa¨ªs lo hubi¨¦ramos realizado con unas 40 personas y unos t¨¦cnicos que nada tienen que envidiar a los americanos", dice la productora ejecutiva, que tiene en plantilla de la producci¨®n nada m¨¢s y nada menos que a 22 conductores, 9 el¨¦ctricos y maquinistas, 5 maquilladores, 5 peluqueros, 5 ayudantes de vestuario y una largu¨ªsima retah¨ªla m¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.