Enganchados a Cacho
El soriano encabeza el grupo espa?ol con opci¨®n a luchar por las medallas
La primera jornada de los campeonatos sirvi¨® para que los espa?oles que van a luchar por las medallas mostraran su estado de forma. Cacho est¨¢ impresionante y Ca?ellas le va a acompa?ar en la final de 1.500 metros, lo que permite presagiar que pueda haber doblete en el podio. Tambi¨¦n habr¨¢ dos espa?oles en la final de 3.000 metros y otros dos en la de p¨¦rtiga. Cacho estuvo sometido a una prueba de fuego durante 1,200 metros. Era una carrera sucia, entendi¨¦ndose como tal aquella en la que se suceden los cambios de posici¨®n, porque todos quieren estar delante y hay cambios de ritmo, empujones y cuanto sea necesario para impedir los adelantamientos. A Cacho nadie le respet¨® y su tercera posici¨®n se convertir¨ªa en quinta o sexta en cuanto se descuidara. Tuvo que hacer valer su poder¨ªo para no quedar engullido por el grupo.Hasta que los osados no pagaron el esfuerzo, lo que sucedi¨® a los 1.200 metros, la carrera no estuvo nada clara. Entonces quedaron cuatro en cabeza, entre ellos Cacho, con la suficiente ventaja como para tomarse un respiro en los ¨²ltimos 100 metros. El orden en que se produjo la llegada daba lo mismo. Se trataba de una clasificaci¨®n para la final. Ca?ellas entr¨® en ella con mayor suspense, porque deja todo para los ¨²ltimos metros. Otros clasificados para las finales, en las que pueden tener opci¨®n a medalla, fueron Anacleto Jim¨¦nez e Isaac Viciosa.
Sandra Myers no compiti¨® por un puesto en la final, sino en las semifinales y corri¨® bajo la confianza de quienes afrontan las primeras eliminatorias como un tr¨¢mite necesario e inevitable. Y tal prudencia, a veces, causa disgustos. Myers se salv¨® ayer por 12 cent¨¦simas de segundo. No pudo ser primera, ni siquiera segunda y tuvo que esperar a la repesca de mejores tiempos para ver si se clasificaba.
Ganar, no va a ganar, porque la rusa Irina Privalova, tras reinar en los 60, 100 y 200 metros, quiere probar fortuna en distancias mayores y apuesta sobre seguro. A Myers le queda la posibilidad de la plata y el bronce, que tampoco est¨¢n f¨¢ciles.
Entre los atletas eliminados, quien se lo tom¨® peor fue Carlota Castrejana, que ayer volvi¨® a Barcelona, donde fue olimpica en 1992 con el equipo de baloncesto, para participar en salto de. altura. Recientemente estableci¨® el r¨¦cord de Espa?a con 1,89 metros y los Mundiales fueron su primera toma de contacto con la alta competici¨®n en su nuevo deporte. En la v¨ªspera ya hab¨ªa mostrado su nerviosismo: "En baloncesto todo era m¨¢s sencillo, porque la pista era para nosotras solas. Aqu¨ª estamos todos mezclados, los corredores por un lado, los saltadores por otro...".
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