Christopher anuncia que Israel y Siria reanudar¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas el di¨¢logo sobre el Gol¨¢n

Israel y Siria reanudar¨¢n conversaciones directas sobre los altos del Gol¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas, anunci¨® ayer en Damasco el secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, al concluir sus seis d¨ªas de gira por Oriente Pr¨®ximo. Las conversaciones entre los dos pa¨ªses, rotas en diciembre, ser¨¢n celebradas por los embajadores en Washington. El enfoque triunfalista de Christopher contrasta con la cautela en Damasco y Jerusal¨¦n. Seg¨²n Efe, por otra parte, Siria ha aceptado "en principio" los mecanismos de seguridad para el Gol¨¢n propuestos por Israel, pero Hafez el Asad sigue considerando imprescindible la retirada total de las tropas israel¨ªes del Gol¨¢n para que se logre una paz global.

Christopher trataba de presentar el resultado de su octava gira por Oriente Pr¨®ximo como un avance significativo. Los israel¨ªes, discretos, no compart¨ªan plenamente ese optimismo. Para complicar el cuadro, los sirios permanec¨ªan en absoluto silencio.Las evaluaciones que se hac¨ªan de la nueva ronda de conversaciones secretas entre el presidente sirio, Hafez Asad, y el secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher (dos horas ayer, siete en total desde el lunes), eran una colecci¨®n de adivinanzas que se despejaron poco despu¨¦s. ?Ha conseguido Christopher convencer a Asad de que reanude las negociaciones militares con Israel en Washington, interrumpidas en diciembre? ?Cu¨¢l, si hay alguna, ha sido la novedosa variaci¨®n en el campo sirio? ?Existe un acuerdo para reactualizar el componente liban¨¦s en la ecuaci¨®n en ciernes?

'Plant¨®n' de Asad

"Los sirios parece que no est¨¢n facilitando las cosas a Christopher", comentaba anoche un alto funcionario israel¨ª que pidi¨® no ser identificado. Se refer¨ªa a informaciones seg¨²n las cuales Christopher, tras su entrevista con Asad, tuvo que esperar tres horas en su hotel de Damasco para conferenciar con el vicepresidente Abdel Hal¨ªm Jadam. Interpretado en Israel ese plant¨®n como una manifestaci¨®n de que las cosas no iban tan bien como los norteamericanos pretend¨ªan presentar, s¨®lo cab¨ªa espacio para la especulaci¨®n.

Hasta diciembre pasado, el di¨¢logo de Washington hab¨ªa permiti¨® encuentros de generales de Israel y Siria para discutir los aspectos de seguridad de los altos del Gol¨¢n, que Siria reclama insistentemente y que Israel usa como ficha de negociaci¨®n en la b¨²squeda de un pacto de paz s¨®lido y duradero. Habr¨¢ que ver si se sigue avanzando por ese camino.

Israel est¨¢ ansioso por atraer a Siria al elenco de buenos vecinos, aunque sin comprometerse a responder -al menos p¨²blicamente- a las inflexibles expectativas de Damasco: la devoluci¨®n total -"hasta el ¨²ltimo ¨¢tomo", es la gr¨¢fica expresi¨®n utilizada en los discursos y editoriales de Damasco- como condici¨®n para hablar de paz.

Seg¨²n varios analistas, Asad podr¨ªa consentir la reanudaci¨®n de las negociaciones siempre y cuando Israel presente algunas iniciativas aceptables en lo que concierne a la estructura de seguridad -la desmilitarizaci¨®n del Gol¨¢n, posiblemente bajo supervisi¨®n internacional. Pero anoche hab¨ªa m¨¢s de un elemento para creer que Siria podr¨ªa incluir en el paquete la cuesti¨®n de L¨ªbano, donde el Ej¨¦rcito israel¨ª mantiene una franja de ocupaci¨®n en el sur. Quiz¨¢ por ello no fue coincidencia que el Gobierno liban¨¦s propusiera -y consiguiera- movilizar a su pueblo con motivo del aniversario de la primera invasi¨®n israel¨ª.

Convertido nuevamente en terreno para los experimentos regionales, L¨ªbano podr¨ªa ofrecer un bar¨®metro de las intenciones presentes: si Israel se retira de L¨ªbano y los sirios consiguen silenciar el ¨²ltimo frente de batalla en Oriente Pr¨®ximo, las condiciones para un entendimiento podr¨ªan presentarse con m¨¢s claridad, una cualidad que atraer¨ªa a Siria m¨¢s que las simples declaraciones de buenas intenciones.