Real apag¨®n

"Nos ha pillado en lo mejorcito. F¨ªjese, cuando se iba a ver a la Infanta entrar en la catedral. Y encima lo est¨¢bamos grabando en v¨ªdeo". Mar¨ªa Luisa S¨¢nchez se qued¨® ayer compuesta y sin parte de la boda real. Igual que ella, la treintena de vecinos de las calles de Sacramento, 10, y Mayor, 77, en el distrito Centro. La culpa fue de una aver¨ªa el¨¦ctrica. "Los fallos siempre suceden cuando no deben, pero esta vez m¨¢s", confesaba el jefe de turno de Uni¨®n Fenosa, Manuel Mart¨ªn.El corte de fluido el¨¦ctrico dur¨® unos quince minutos, pero ayer no era una ma?ana cualquiera, era la de la boda de Elena de Borb¨®n y Jaime de Marichalar. "?Me ha dado un coraje!", afirmaba Mar¨ªa Luisa. Y no s¨®lo a ella, tambi¨¦n a sus cu?adas y sobrinos, todos reunidos en torno al televisor. Tuvieron que esperar al final del enlace para poder ver bien de cuerpo entero a los novios, cuando ya eran marido y mujer.

"Nos consolamos pensando que lo repetir¨¢n m¨¢s veces", a?ad¨ªa la vecina. No se asust¨® por el apag¨®n: r¨¢pidamente lo atribuy¨® a la compa?¨ªa de la luz y no a ning¨²n sabotaje o cosas peores.

Quien tambi¨¦n se hab¨ªa preparado para una ma?ana televisiva era Mar¨ªa Teresa Castellanos, vecina de Mayor, 77. "Me dej¨¦ la comida hecha ayer para poder ver hoy la boda tranquilamente", se?alaba. Cuando su televisor estaba rodeado de espectadores, adi¨®s imagen. "Me ha sentado fatal", dec¨ªa. Pero no se arredr¨®: r¨¢pidamente rescat¨® una radio de pilas. Igual que su vecina de la calle de Sacramento, estaba grabando la ceremonia. Pero la cosa ya est¨¢ arreglada: "Hemos llamado a unos amigos para que nos pasen el v¨ªdeo".

Los vecinos se quedaron sin parte de la boda, pero los industriales han tenido mayores problemas, por la aver¨ªa, que dej¨® fuera de combate los motores de las c¨¢maras frigor¨ªficas durante varias horas. "Debi¨® de producirse durante la madrugada", dec¨ªa Miguel Jim¨¦nez, del restaurante La Quinta del Sordo.

En Fenosa confirmaban que el fallo s¨®lo afect¨® al alumbrar de, en los 15 minutos aproximadamente que los t¨¦cnicos tuvieron que suspender el fluido para encontrar la aver¨ªa, que afectaba s¨®lo a la fase que almenta los motores. Una brigadilla tuvo que trabajar duro en la calle para repararla.

La ¨²nica que se salv¨® del apag¨®n fue Isabel Muro, de 84 a?os. Su piso quinto de Mayor, 77, recibe la luz del n¨²mero 75. "Esto fue cosa de Alfonso XIII. Este piso era de unos amigos y ven¨ªa a divertirse. Le dieron entrada por el 77 porque hab¨ªa ascensor". Y ella, pegada a la pantalla, en camis¨®n, era la ¨²nica que recordaba que aquel rey sufri¨® un atentado el d¨ªa de su boda, precisamente ante su portal. Eran cosas del pasado.