El 'club de los ex'
Lisboa fue el escenario elegido. Los m¨¢ximos dirigentes del Milan y Benfica aprovecharon la concurrencia de un centenar de periodistas para anunciar, casi por Ia puerta falsa, la creaci¨®n de una singular asociaci¨®n, una especie de Trilateral del f¨²tbol europeo con todos aquellos clubes que han sido campeones de Europa. Inmediatamente surgi¨® una advertencia sobre el car¨¢cter poco menos que filantr¨®pico de dicho "club de los ex" acompa?ado del nombramiento de Ram¨®n Mendoza como su presidnte. ?H¨¦mos de creernos que esta iniciativa tenga un fin exclusivamente ben¨¦fico?Si un milagro no lo remedia, la pr¨®xima Liga de Campeones ser¨¢ un jugoso pastel del que no participen clubes como el Barcelona, el Bayern de M¨²nich, el mismo Mil¨¢n, el Liverpool o el Benfica, por poner algunos gloriosos ejemplos. Ejemplos igualmente significativos como el de constatar c¨®mo el laureado Real Madrid no conoce la Liga de Campeones, cuyo nacimiento e inmediato ¨¦xito sorprendieron a la Casa Blanca en ¨¦poca de vacas flacas mientras perd¨ªa un par de t¨ªtulos en la ¨²ltima jornada. A diferencia de otros a?os, la evaluaci¨®n econ¨®mica de los da?os es mucho m¨¢s simple de cuatificar: entre estar y no estar en la Liga de Campeones hay una diferencia m¨ªnima de 1.000 millones de pesetas, una cifra demasiado redonda como dejarla escapar.
El empuje que le ha dado elsueco Johansson a la UEFA tiene un alcance m¨¢s amplio que el haber. sabido dar con una f¨®rmula que permita ganar m¨¢s dinero. Bajo su direcci¨®n, la UEFA se est¨¢ alejando de la pol¨ªtica de la FIFA, tendente a manipular los intereses del Tercer Mundo para, sobre todo, impedir que todo buen negocio se le escape de las manos.
Johansson reuni¨® a los representantes de los clubes europeos en Ginebra. No hubo una propuesta concreta. Todos volvieron a casa en silencio. Por hablar, se habl¨® de las enormes exigencias financieras de los clubes m¨¢s poderosos y del gran ¨¦xito que tendr¨ªa una Liga de Campeones que diera cobijo al Madrid y al Bar?a a un tiempo, al Milan, al Inter y al Juventus, al Liverpool, al Benfica y al Oporto, al Bayern de M¨²nich, al propio Celtic de Glasglow y al mism¨ªsimo Estrella Roja de Belgrado, todos ellos ex campeones de Europa. Casualmente, d¨ªas despu¨¦s naci¨® el "club de los ex".
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