El escritor J. G. Ballard afirma sentirse "el ¨²ltimo surrealista"
El autor brit¨¢nico presenta en Espa?a su nueva novela
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Los ojos de Ballard. Intensos y distantes. Parecen mostrar una conmoci¨®n permanente. ?Qu¨¦ avizora uno en ellos? ?Los aviones Mustang que fascinaron a Jim en El Imperio del sol? ?El tenue resplandor blanco de Nagasaki en las llanuras de China? ?P¨¢lidas serpientes en una playa crepuscular? ?Un bosque que cristaliza convertido en una gran joya fulgurante? James Graham Ballard, J. G. Ballard (Shangai, 1930), saludado como el ¨²ltimo surrealista -definici¨®n con la que est¨¢ plenamente de acuerdo-, se encuentra en Barcelona con motivo de la publicaci¨®n en Espa?a de su nueva novela, Fuga al para¨ªso (Emec¨¦). "La imaginaci¨®n es m¨¢s fuerte que cualquier droga", dijo ayer a este diario.
Autor de 22 libros (entre colecciones de cuentos y novelas), la mayor¨ªa adscritos de manera superficial al g¨¦nero de la ciencia ficci¨®n, Ballard se convirti¨® en un escritor mundialmente popular con El imperio del sol, un libro en el que narraba su infancia en China durante la II Guerra Mundial y que fue llevado al cine por Spielberg. La obra de Ballard, sin embargo, hac¨ªa mucho tiempo que hab¨ªa despertado el inter¨¦s fuera de la fronteras de la ciencia ficci¨®n, a la que sin duda no pertenecen obras suyas clave como Crash -que proyecta filmar este verano David Cronenberg- o La exhibici¨®n de atrocidades (ambas publicadas por Mipotauro). Influenciado por los pintores surrealistas (sobre todo Delvaux, con sus misteriosas mujeres), en la narrativa de Ballard destacan varios motivos recurentes elevados a la categor¨ªa de s¨ªmbolos.?Por qu¨¦ son tan fascinante las piscinas vac¨ªas? "Bien, es algo misterioso, soy feliz cuando escribo sobre piscinas vac¨ªas, casas vac¨ªas, hoteles vac¨ªos. La raz¨®n es quiz¨¢ mi experiencia en la II Guerra Mundial. Viv¨ªa en Shangai y la ciudad sufri¨® una transformaci¨®n radical con la invasi¨®n japonesa: qued¨® desolada. Algo pas¨® en m¨ª entonces, cuando ten¨ªa 12-13 a?os. Me he pasado la vida tratando de entender el qu¨¦. Fui testigo de cosas terribles. Shangai era una ciudad moderna y de golpe todo acab¨® y dio paso a los cr¨ªmenes m¨¢s brutales".
En la novelas de Ballard, la mente parece capaz de configurar el paisaje, que expresa las conmociones internas de los personajes. "Durante la ocupaci¨®n, en el campo de prisioneros japon¨¦s, mi imaginaci¨®n estaba desbordada. Todo mi mundo exterior se hab¨ªa derrumbado, todo cambiaba; s¨®lo me quedaba la imaginaci¨®n para sobrevivir".
"En fin", se?ala el escritor, "no quiero que parezca que estoy obsesionado con mi infancia, mi verdadera obsesi¨®n de escritor es entender el mundo de ahora. Descodificarlo, porque me resulta un misterio inmenso. Me considero un escritor de la imaginaci¨®n, ajeno al realismo imperante. Trato de rehacer el mundo en el que vivo, reinventarlo".
Se ha se?alado la similitud de algunos pasajes de Ballard con la imaginer¨ªa que provocan las drogas visionarias. "Se dijo de El mundo de cristal, pero la ¨²nica vez que he tomado LSD fue despu¨¦s de escribir ese libro. La imaginaci¨®n es m¨¢s fuerte que cualquier droga
Su nueva novela Fuga al paraiso, en la que una mesi¨¢nica defensora de los albatros acaba creando un gulag en una isla del Pac¨ªfico, ha sido calificada como una s¨¢tira del ecologismo y del femenismo. "En puridad es un estudio del fanatismo. La doctora Rafferty
[el fan¨¢fico personaje de la novela] cataliza el ansia personal de apocalipsis de cada miembro de su grupo. Creo que as¨ª funcionan los l¨ªderes fan¨¢ticos del mundo real, tienen una especial habilidad para conjurar los sue?os de muerte de sus seguidores".
La pel¨ªcula que hizo Spielberg. "Es una buena pel¨ªcula y en conjunto muy fiel al libro. Consigui¨® captar el esp¨ªritu de la novela. El ¨¦xito de La lista de Schindler ha hecho que en EE UU se revise El imperio del sol como algo serio".
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