El clima cambia; los Gobiernos, no

Durante los pasados cien a?os, el ser humano ha estado emitiendo a la atm¨®sfera cantidades masivas de los llamados gases de invernadero (debido en gran parte al consumo de combustibles f¨®siles y a la destrucci¨®n de los bosques). Estos gases act¨²an de forma similar a los paneles de vidrio de un invernadero, permitiendo pasar la luz del Sol y atrapando el calor remitido por la superficie terrestre. Como consecuencia la Tierra se calienta.Los cient¨ªficos predicen que el efecto de este aumento de temperatura ser¨¢ un cambio del clima. La vida en el planeta estar¨¢ amenazada por desastres ocasionados por este cambio clim¨¢tico, el m¨¢s r¨¢pido en la historia. As¨ª, las lluvias disminuir¨¢n en algunas zonas, afectando a la agricultura y creando desiertos. En otros lugares se incrementar¨¢n las precipitaciones, causando inundaciones y arrastrando la tierra f¨¦rtil. Los cambios de clima incidir¨¢n desfavorablemente en animales y plantas, provocando la extinci¨®n de las especies que no puedan emigrar a climas m¨¢s favorables. El nivel del mar aumentar¨¢ inundando zonas costeras y salinizando, los acu¨ªferos costeros. Todo ello incrementar¨¢ el n¨²mero de refugiados ambientales y el hambre.

Los pa¨ªses industrializados, aunque sea por precauci¨®n, deben cambiar su actual postura y como primer paso adoptar el objetivo de Toronto, que supone reducir un 20% la emisi¨®n de di¨®xido de carbono, principal gas responsable del efecto invernadero en base a los niveles de 1990, para el a?o 2005. El Estado espa?ol, la regi¨®n europea que m¨¢s negativamente se ver¨¢ afectada, debe revisar para alcanzar la reducci¨®n los aspectos relevantes de las pol¨ªticas energ¨¦tica y de transportes. Es decir, el vigente Plan Energ¨¦tico Nacional y el Plan Director de Infraestructuras deben modificarse.-

Presidente de Aedenat.