Elogio de los indecisos

Lo nunca visto. A dos semanas de la primera vuelta de las elecciones presidenciales, los franceses baten r¨¦cords de indecisi¨®n. (...) A merced del debate medi¨¢tico, que privilegia en la derecha el verdadero-falso duelo entre Chirac y Balladur, se adivina, incluso entre los que expresan su preferencia, una oscilaci¨®n del coraz¨®n o de la raz¨®n. La evidencia persiste: m¨¢s del 40% de los franceses no siente nada de este impulso ¨ªntimo que impone una elecci¨®n. Entre ellos hay una gran mayor¨ªa de j¨®venes que, por no haber conocido de la pol¨ªtica m¨¢s que el reino mitterrandiano, son los m¨¢s perplejos. O los m¨¢s indiferentes. (...) Estamos en campa?a electoral. Nada de lo que es sensible, de lo que divide, de lo que ilustra los titubeos de los pol¨ªticos, debe ser abordado. Pero ?para qu¨¦ hablar del paro, el seguro de enfermedad y las jubilaciones? ?Anda ya! Para decir a la gente lo que tiene ganas de entender: que nada cambiar¨¢, que todo subir¨¢ a la vez -los salarios, las prestaciones sociales, la vivienda a buen precio y los empleos-. Pero ?es. imposible! (...) Ya se ver¨¢. Despu¨¦s de la campa?a. Los franceses no se enga?an. De elecci¨®n en elecci¨®n (...) saben perfectamente destilar sus respuestas. Si esta campa?a no les convence es porque no les habla lo suficiente de ellos. (...) Incluso en Francia, donde el juego pol¨ªtico ocupa tanto espacio, el escepticismo crece. ?Podemos alegrarnos de ello? En todo caso, hay que tenerlo en cuenta.

13 de abril