El incierto asesinato de S¨¢ Carneiro

, La muerte sigue a veces tan extra?os y largos vericuetos como la verdad. Al parecer, hab¨ªa una bomba a bordo de la avioneta Cessna que se estrell¨® en diciembre de 1980, minutos despu¨¦s de despegar del aeropuerto de Lisboa. En el aparato viajaban el primer ministro portugu¨¦s, Francisco S¨¢ Carneiro; su ministro de Defensa, Amaro da Costa, y seis acompa?antes, entre los que se encontraba la compa?era sentimental del pol¨ªtico socialdem¨®crata luso. Esa explosiva hip¨®tesis es la que sostienen miembros de la comisi¨®n parlamentaria encargada de analizar todos los aspectos del accidente.Cerca de quince anos mas tarde, y despu¨¦s de innumerables investigaciones, peritajes y an¨¢lisis, expertos brit¨¢nicos afirman haber encontrado en los restos de la avioneta sustancias qu¨ªmicas reveladoras de que hubo una explosi¨®n provocada por un artefacto.

La muerte del jefe del Gobierno y entonces l¨ªder del Partido Socialdem¨®crata portugu¨¦s (PSD), cuatro d¨ªas antes de unas elecciones presidenciales en las que S¨¢ Carneiro hab¨ªa puesto en juego todas sus energ¨ªas para impedir la reelecci¨®n del general Antonio Ramalho Eanes, provoc¨® en Portugal una enorme conmoci¨®n. La versi¨®n oficial de que el accidente se debi¨® a un fallo mec¨¢nico nunca fue un¨¢nimemente aceptada.

Al inicio de cada legislatura, como un rito, los diputados del PSD aprueban la constituci¨®n de nuevas comisiones parlamentarias de investigaci¨®n. Sin embargo, a pesar de las numerosas incongruencias y negligencias encontradas, hasta ahora nunca fue posible llegar a una conclusi¨®n suficientemente clara para dar el asunto por cerrado o justificar la apertura de un proceso criminal.

A la hora de votar el informe final, los partidos de izquierda -socialista y comunista- y una parte de los representantes del PSD consideraron siempre insuficientes los indicios para acreditar la tesis del atentado.

La quinta comisi¨®n, que debe emitir su veredicto hoy, puede dejarse seducir por los nuevos elementos suministrados por peritos ingleses y aceptarlos c¨®mo prueba del crimen. La actual precampa?a para las elecciones generales de octubre y, sobre todo, la eventual candidatura presidencial del general Eanes (apuntado como el principal beneficiario del presunto crimen de Estado) pueden condicionar la decisi¨®n.

Si se admitiera la hip¨®tesis del atentado, todas las circunstancias del mismo quedar¨ªan por esclarecer. ?Qui¨¦n era el destinatario del mort¨ªfero artefacto? Se sabe que Francisco S¨¢ Carneiro decidi¨® en el ¨²ltimo momento sumarse al grupo que embarc¨® en el aeropuerto de Lisboa para asistir en Oporto al ¨²ltimo mitin de la Campa?a presidencial del candidato de la derecha, el general Soares Carneiro. ?C¨®mo, cu¨¢ndo y qui¨¦n coloc¨® la bomba? ?Y, sobre todo, qui¨¦nes fueron los responsables intelectuales del atentado y de la conspiraci¨®n ulterior para hacer desaparecer pruebas y testigos?