El Bidasoa alcanza la gloria en Zagreb

El Bidasoa Elgorriaga emergi¨® ayer del infierno de Zagreb con la Copa de Europa. Entre las llamas qued¨® la gran calidad de los croatas del Badel, su obsesiva b¨²squeda del triunfo y 12.000 espectadores enfervorizados. Todo ello fue insuficiente para remontar los diez goles de ventaja del club espa?ol y romper la serenidad de un equipo de ensue?o. Las calles de Ir¨²n vibraron a¨²n m¨¢s que hace dos semanas, tras el triunfo en la Liga.Varios factores disuad¨ªan de prematuros c¨¢nticos de alegr¨ªa. El Badel, campe¨®n de Europa en 1992 y 1993, aprovech¨® en octavos de final el miedo esc¨¦nico que el infierno de Zagreb puede crear en los ¨¢rbitros para vencer por 33-17 al CSKA tras caer 32-21 en Mosc¨².

Sin embargo, Juantxo Villarreal exprimi¨® sus 40 a?os de balonmano y 20 de entrenador -tiene 47- para ofrecer a sus hombres el mejor zumo t¨¢ctico "Saldremos con arrogancia. Para que no nos asunten, lo mejor es asustar nosotros primero. No son mejores que nosotros ni por el forro".

Todo empez¨® bien. El Elgorriaga se adelant¨® (2-0), ralentiz¨® el ataque y cerr¨® su muralla defensiva en 6-0 para frenar el ¨ªmpetu de los croatas. Pero ¨¦stos, inmunizados contra el desaliento, cambiaron a una defensa a¨²n m¨¢s pegajosa y dieron un recital de circulaciones y tiros en suspensi¨®n, rosca, vaselina y vuelo cuya belleza y eficacia inquiet¨® seriamente a los vascos: a los 20 minutos, el Badel ganaba por 11-7. Adem¨¢s, Ord¨®?ez rend¨ªa a medio gas tras recibir un fuerte golpe.

Era el momento d¨¦ demostrar que la preparaci¨®n psicol¨®gica estaba a la altura de las circunstancias. La brillantez de Svensson y Barreto (par¨® dos penalties) bajo los palos, la potencia desgarradora de Perunicic, -marc¨® un impresionante gol en suspensi¨®n desde 12 metros- y los toques de serenidad de Kiss¨¦lev, que logr¨® otro gol crucial cuando su equipo ten¨ªa un jugador menos, permitieron que el Elgorriaga llegara al descanso con s¨®lo tres goles de desventaja. El poder sofrol¨®gico de Villarreal se volvi¨® a ver al inicio de la segunda parte. La fr¨ªa y engrasada maquinaria del club vasco consigui¨® que el marcador estuviera en 17-16 a los cinco minutos. Los croatas volvieron a intentarlo, pero ya era demasiado tarde para jugar por algo m¨¢s que la honrilla.

Los ciudadanos iruneses, totalmente entregados a su club de balonmano, han engalanado las calles de la ciudad para recibir a un equipo campe¨®n que se romper¨¢ pronto con el fichaje de Svensson por el Barcelona. Elgorriaga es, probablemente, el mejor del mundo. Eso explica que saliera victorioso del infierno de Zagreb.