Los clubes espa?oles hacen historia

Tres clubes espa?oles han revalidado esta temporada los tres t¨ªtulos conseguidos el a?o pasado por el balonmano espa?ol. El Elgorriaga es campe¨®n de la Copa de Europa; el Barcelona, de la Recopa; y el Granollers, de la Copa EHF. Es un ¨¦xito sin precedentes. Ning¨²n pa¨ªs hab¨ªa realizado algo similar dos a?os consecutivos. S¨®lo la extinta URSS, en 1987, gan¨® los tres t¨ªtulos europeos el mismo a?o. Sin embargo, este ¨¦xito no impide que todas las partes implicadas persistan en su intento de buscar soluciones para paliar la crisis interna en la que est¨¢ instalado el balonmano espa?ol de ¨¦lite.La primera reflexi¨®n de Miguel Roca, gerente de la Asociaci¨®n de Clubes de Balonmano (Asobal), pone la carne de gallina: "Este a?o acaba el contrato con Televisi¨®n Espa?ola y no ser¨¢ f¨¢cil lograr renovarlo en buenas condiciones". Realmente, parece incre¨ªble que un deporte que acaba de. llevar a Espa?a a la cumbre mundial encuentre, tantas dificultades para asegurar su difusi¨®n en el ¨¢mbito nacional. Y a¨²n m¨¢s incre¨ªble parece que el problema fundamental del acuerdo sea una cuesti¨®n econ¨®mica, cuando las cifras de negociaci¨®n son rid¨ªculas si se comparan con las del baloncesto, por poner un ejemplo.

Sin embargo, algunos ¨ªndices de audiencia muy recientes se?alan que tanto el balonmano como el baloncesto tienen un inter¨¦s muy relativo para los telespectadores. El partido entre el El gorriaga y el Teka -un domingo a las 12.30- que decid¨ªa la Liga fue visto por 450.000 telespectadores. Y uno reciente de la fase final de baloncesto alcanz¨® los 500.000. El f¨²tbol es el ¨²nico deporte que arrasa.

"Ahora mismo, el Mundial A de Islandia no se ofrecer¨¢ por televisi¨®n en Espa?a", explica Roca. "Espero que eso se arregle a ¨²ltima hora. Pero las cifras de audiencia hacen prever que cualquier negociaci¨®n no ser¨¢ sencilla. Y para el balonmano es indispensable lograr un buen contrato, tanto para asegurar la difusi¨®n como para poder realizar un ingreso que es fundamental".

Esa es una parte importante del debate interno que el balonmano espa?ol est¨¢ viviendo en estos momentos. Estamos ante la mejor Liga del mundo, la que tiene a los mejores, jugadores extranjeros, y cuyos clubes han demostrado ser los m¨¢s eficaces de Europa. Pero cuando se hurga un poco, es f¨¢cil advertir que a¨²n todo es aficionado, que los jugadores firman contratos que saben que no cobrar¨¢n y que los clubes se los ofrecen en las mismas condiciones. Todo est¨¢ cogido con pinzas.

"?ste es uno de los retos que nos hemos propuesto en los pr¨®ximos dos a?os: vamos a regular las deudas a final de temporada para partir de cero el pr¨®ximo a?o. Y despu¨¦s debemos convertirnos en una Liga profesional con todo lo que eso implica", explica Miguel Roca.

Y lo que eso implica es acabar con toda la inercia anterior, crear una comisi¨®n de control dura que compruebe la veracidad de los presupuestos presentados por los equipos y su viabilidad real y que impida participar en la Liga a quienes no cumplan los requisitos m¨ªnimos. Probablemente, implique tambi¨¦n una reducci¨®n de los 16 equipos actuales a 14. Y, a la larga, supone tambi¨¦n la conversi¨®n de los clubes en sociedades an¨®nimas (SAD).

Lo que es dudoso es que esas soluciones logren impedir que las distancias entre los seis primeros clasificados de la Liga y el resto sean menos. Ni que las diferencias entre los presupuestos puedan superar en algunos casos los 200 millones de pesetas. "En Espa?a hay cuatro o cinco equipos que pueden fichara los mejores jugadores nacionales y extranjeros. De seguir as¨ª podemos llegar a ver ocho equipos espa?oles en las cuatro finales europeas", dice Juan de Dios Rom¨¢n, director t¨¦cnico de la Federaci¨®n Espa?ola de Balonmano (RFEB), con cierta iron¨ªa.

Por el momento, la ¨²nica medida que se ha tomado, y que debe ser ratificada en la asamblea de la RFEB pr¨®ximamente, es que los equipos podr¨¢n utilizar a tres extranjeros en todas las competiciones a partir de la pr¨®xima temporada, menos en la Liga donde s¨®lo se podr¨¢n alinear dos,. Y Roca cree que eso es perjudicial para el balonmano espa?ol.