Grupos ciudadanos plantean una marcha antimuebles urbanos para el 20 de mayo

VIENE DE LA P?GINA 1El acto finalizar¨¢ en la Puerta del Sol, donde los participantes formar¨¢n corros a manera de columna publicitaria que girar¨¢n en torno a la peana de Carlos III , estatua llamada El Tornillo porque hay que dar 11 vueltas para leer su inscripci¨®n. Se pretende, precisamente, recitar de una tirada el texto que homenajea al rey-alcalde.

En este primer encuentro, celebrado en el C¨ªrculo de Bellas Artes, inform¨® sobre la iniciativa una peque?a representaci¨®n del Club de Debates Urbanos, formada por los arquitectos Aroca, Ram¨®n L¨®pez de Lucio, Francisco Pol, Teresa Arenillas y ?ngeles de Coig O'Donnell, entre otros. Enseguida se sum¨® Aedenat, que ya ha iniciado su campa?a de recogida de firmas con el lema ?Vaya trasto! para protestar por lo que califican de "manipulaci¨®n que se hace de la causa ecol¨®gica como coartada para un nuevo negocio publicitario, que invade el ya escaso espacio peatonal de nuestra ciudad".

Igualmente se incorporaron a la protesta los representantes de Greenpeace, asociaciones de dise?adores gr¨¢ficos, de soci¨®logos, de escritores, estudiantiles (ya se han pronunciado las facultades de Ciencias de la Informaci¨®n, Arquitectura y Bellas Artes) y se espera que en breve tome una decisi¨®n en el mismo sentido la Uni¨®n de Actores, colectivo que agrupa a casi todos los actores de cine y de teatro y al que pertenecen caras conocidas, como Imanol Arias, Ana Bel¨¦n, Marisa Paredes, Ariadna Gil y otros.

Capirotes

El Club de Debates Urbanos tambi¨¦n se est¨¢ poniendo en contacto en estos d¨ªas con la Asociaci¨®n de Artistas Int¨¦rpretes Ejecutantes (entre ellos figuran Luis Cobos, Joaqu¨ªn Sabina, Ramonc¨ªn ... ), y la Asociaci¨®n de Profesionales de la Danza.

En la reuni¨®n celebrada salieron tambi¨¦n a relucir como posibles pregoneros de la manifestaci¨®n el dibujante M¨¢ximo y los escritores Luis Carandell y Moncho Alpuente.

En esta primera toma de contacto ha sido especialmente bien aceptada por todos la propuesta de confeccionar unos grandes capirotes con los que acudir a la manifestaci¨®n:

"Como llevar¨¢n publicidad incorporada, queremos otorgarles la categor¨ªa de muebles urbanos y los que tengan un grifo incorporado queremos que sean fuentes", dice Aroca.

La intenci¨®n de los participantes no es s¨®lo protestar, sino conseguir que este mobiliario urbano desaparezca: "Siempre creo", agrega Aroca, "que los errores se pueden corregir y que si hay una protesta parecer¨¢ zonable pensar que el Ayuntamiento reconsiderar¨¢ su postura de convertir nuestra ciudad en un escaparate publicitario cutre y hortera".

"Todos los que quieran expresar su desaprobaci¨®n no deben faltar, la ciudad es de todos y nosotros somos responsables, por acci¨®n u omisi¨®n, de lo que pasa en ella. Si pensamos que estas cosas son irremediables ?Dios sabe lo que acabar¨¢ pasando!", exclama el director de la Escuela de Arquitectura.

Los asistentes tambi¨¦n debatieron sobre la conveniencia de celebrar o no la manifestaci¨®n en plena campa?a electoral. Hubo posiciones a favor y en contra, y finalmente decidieron no retrasar la fecha a alg¨²n d¨ªa despu¨¦s de las votaciones: "Precisamente quien ha hecho esto en plena campa?a electoral ha sido el Ayuntamiento, y si la ¨¦poca de campa?a va a ser un periodo de tiempo en el que se van a hacer todo tipo de desafueros, no podemos quedarnos callados por no influir en dicha campa?a, sobre todo teniendo en cuenta que en estos propios artefactos estuvo publicitada una campa?a que podr¨ªa entenderse como de propaganda favorable al equipo municipal", se?ala Aroca. El arquitecto L¨®pez de Lucio apostilla: "Quieren adornar la ciudad con mamotretos despreciando la est¨¦tica de los ciudadanos y creyendo que enga?an el buen gusto de la gente".

Aroca tambi¨¦n apunt¨® otra posible resistencia: "Se podr¨ªa acabar con los artefactos si nos neg¨¢ramos a comprar las cosas que se anuncien en ellos y avisar a los ciudadanos de que nocompren lo que les oprime".

La inversi¨®n en el mobiliario urbano ha costado a Cemumasa, empresa francesa adjudicataria, 3. 100 millones, a los que hay que a?adir 372 millones por a?o de mantenimiento. Se han instalado 1.570 aparatos. El negocio oscilar¨¢ entre 10.000 y 20.000 millones en los 15 a?os de adjudicaci¨®n.