El Bar?a iguala la final en M¨¢laga

concentrado como en ocasiones anteriores. La fortaleza de la defensa barcelonista no le permit¨ªa adem¨¢s encontrar posiciones c¨®modas ni para el tiro exterior ni para las penetraciones a canasta. Todo el potencial se reduc¨ªa a la fortaleza del norteamericano Ansley, pero era demasiada concesi¨®n a un duro rival.En una segunda mitad plagada de nervios, el Barcelona volvi¨® a irse de 10 puntos en el marcador a falta de s¨®lo cinco minutos. Unicaja intent¨® la proeza, pero la ventaja era demasiado grande. La fase de desconcentraci¨®n ante la fortaleza del equipo de A¨ªto dur¨® demasiado y coincidi¨® con el repentino cansancio que atac¨® a Ansley.

Sin embargo, hubo esperanza para el milagro. Los fallos en los tiros libres de D¨ªez y Crowder permitieron a Unicaja ir minando la diferencia hasta colocarse a tres puntos en el ¨²ltimo segundo, despu¨¦s de que Ansley tomara la responsabilidad y se jugara un triple a falta de seis segundos. Ansley tuvo en sus manos una segunda oportunidad para jug¨¢rsela, pero tambi¨¦n vana: intentar fallar un segundo tiro libre y que alguien anotara en el rebote, pero fall¨® el primero de los lanzamientos y el marcador se qued¨® al final en 78-80.

El Barcelona vuelve as¨ª a recuperar la ventaja de campo y vuelve a poner al historia a su favor: siempre el vencedor de la fase regular ha sido al final el campe¨®n de Liga. Aunque el Unicaja tambi¨¦n tiene un lado de la estad¨ªstica al que agarrarse: ning¨²n equipo ha superado nunca una desventaja de 2-1.