Wolf, Grossmann y otros 6.000
M¨¢s de 6.000 personas que trabajaron directamente o colaboraban con los servicios secretos de la antigua RDA esperaban ansiosamente la ¨²ltima sentencia del Tribunal Constitucional alem¨¢n, que se ha retrasado cuatro a?os. Originariamente, el fallo se refiere al caso del ¨²ltimo jefe del espionaje de Alemania del Este, Werner Grossmann, pero servir¨¢ de manto a otros procesos que estaban abiertos y que deber¨¢n ser sobrese¨ªdos y a otros que ni siquiera se hab¨ªan abierto, adem¨¢s del relativo a Markus Wolf, ya condenado.En el caso de Grossmann, la C¨¢mara Territorial de Berl¨ªn decidi¨® en julio de 1991 dar carpetazo mientras el Tribunal Constitucional no determinase si se estaba dando un tratamiento desigual en las relaciones de la justicia con los esp¨ªas de la RDA, hoy ciudadanos alemanes, y los que trabajaron para la RFA en el mismo periodo. El fallo de ayer confirma la existencia de tal discriminaci¨®n. Junto a Grossmann iban a ser procesados otros cuatro altos cargos del Ministerio para la Seguridad del Estado (Stasi) que tambi¨¦n se benefician de la sentencia.
El mismo tribunal berlin¨¦s reiter¨® los interrogantes sobre la constitucionalidad de los juicios contra los esp¨ªas del Este en septiembre de 1993. En el intent¨® de procesar al jefe del contraespionaje, G¨¹nter Kratsch, los jueces se negaron a abrir un sumario y apelaron de nuevo a Karlsruhe.
De distinta opini¨®n han sido los magistrados del Tribunal Superior de D¨¹sseldorf, que baten todas las marcas en la condena a esp¨ªas de la RDA. Frente a ellos compareci¨® Marcus Wolf, que en diciembre de 1993 fue condenado a seis a?os de c¨¢rcel por traici¨®n a la patria. Wolf permanec¨ªa sin embargo en libertad porque la sentencia no se hab¨ªa hecho firme, esperando el fallo del Supremo.
Ante otros tribunales tambi¨¦n se hizo patente la dificultad para determinar la traici¨®n a la patria occidental de los esp¨ªas del Este. El Tribunal Superior de Baviera conden¨® por traici¨®n, en 1991, a un miembro del espionaje occidental (BND) que colaboraba con los servicios secretos del Este. Mientras la traici¨®n para ¨¦l se sald¨® con una condena a 10 a?os de c¨¢rcel, sus colaboradores, oficiales de la Stasi, recibieron sentencias suspendidas de entre 14 y 24 meses.
En un caso mas reciente, Kurt Gailat, el hombre de contacto del esp¨ªa G¨¹nter Guillaume, que hizo caer al canciller Willy Brandt, fue condenado en junio de 1994 a dos a?os de c¨¢rcel.
La sentencia del Tribunal Constitucional tendr¨¢ repercusi¨®n en la mayor parte de los casos, en los que las sentencias estaban suspendidas.
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