"Hay que entender a la mujer, y m¨¢s al toro"

San Isidro 1995, patrono de Madrid, 28 corridas de toros d¨ªa tras d¨ªa, Espa?a de luto por Lola Flores. Am¨¦n. Pero Antonio Chenel, el maestro de la vida, de la picaresca, hijo del Madrid m¨¢s madrile?o y del saber estar, cada tarde, con Manolo Mol¨¦s, para la tele Canal +, en Las Ventas de sus entra?as, dice su sentencia del torero gallardo, del toro cortejano, acochinado, corniveleto...Pregunta. ?Se olvid¨® ya de Lola Flores?

Respuesta. Eso nunca: era un genio y mi amiga.

P. ?Y de Butrague?o se ha olvidado?

R. Tampoco: es un genio del f¨²tbol.P. ?Por qu¨¦ muri¨® Joselito hace 75 a?os?

R. Creo que tuvo un peque?o descuido liando la muleta.

P. ?Lo de "Las Ventas, c¨¢tedra del toreo" es una chuler¨ªa madrile?a con fundamento?

R. Con mucho fundamento.

P. ?Su mech¨®n de pelo blanco es signo sexual?

R. No, de los disgustos.

P. ?Tiene algo que decir contra la autoridad recia del tendido 7 de Las Ventas?

R. No, al rev¨¦s; a pesar de sus errores, dan seriedad.

P. ?Por qu¨¦ los toreros, tan devotos, no llegan a los altares?

R. El torero es devoto, pero todo lo contrario de un santo.

P. ?Por qu¨¦ en San Isidro, en Madrid, se llena Las Ventas y no las iglesias?

R. En los ¨²ltimos a?os, las corridas, se han hecho un acto social en el que hay que estar.

P. ?Qu¨¦ es una cara bonita de mujer en los tendidos?

R. Es precioso, bonito y est¨ªmulo para el torero.

P. ?La reventa de entradas es cosa de Lazarillo de Tormes o de un Rold¨¢n cualquiera?

R. Tiene de las dos cosas.

P. ?Le gusta que le llamen maestro?

R. Me encanta. Es lo que so?¨¦ desde peque?o.

P. ?Y prefiere que digan Antonio o Anto?ete?

R. Antonio.

P. ?Qu¨¦ admira m¨¢s una espa?ola en un torero?

R. Su gallard¨ªa y majeza delante del toro.

P. ?Y una extranjera?

R. Lo mismo.

P. Desde aquellos toreros de leyenda, Pedro Romero y Costillares, el lema de la suerte de recibir es "parar los pies y matar o morir". ?No se le pone carne de gallina?

R. No, porque es la suerte suprema y la m¨¢s bella.

P. ?En qu¨¦ se diferencia la confrontaci¨®n del hombre con el toro y la del hombre con la mujer?

R. Es muy parecida. Hay que entender ala mujer, y m¨¢s al toro.

P. ?C¨®mo le explicar¨ªa una ver¨®nica a un ingl¨¦s.?

R. Ejecut¨¢ndola.

P. ?Por qu¨¦ en estos tiempos no embisten los toros?

R. Por falta de casta.

P. ?Se acabar¨¢ la fiesta?

R. No. Se volver¨¢ a los or¨ªgenes, al encaste.

P. ?Imagina que un d¨ªa todos los toreros sean mujeres?.

R. Eso nunca: no imagino a una mujer torera.

P. Cuando Jesul¨ªn de Ubrique se encerr¨® en una plaza llena s¨®lo de mujeres, ?le dieron ganas de reaparecer?

R. No me dio verguenza.

P. ?Por qu¨¦?

R. Por la pinta de charlotada.

P. ?Qu¨¦ es el sol en una plaza de toros?

R. "Para los toros, sol y moscas", se ha dicho siempre.

P. ?Hay algo peor que el viento en un coso?

R. Aparte de las ideas de un toro, lo peor es el viento.

P. ?Es amigo de alg¨²n monosabio?

R. De todos. Mi padre fue monosabio, y mi hermano.

P. ?Qu¨¦ es un arenero?

R. Alguien muy pr¨¢ctico, y adem¨¢s, cuando hay cogida grave, siempre lleva un torniquete para evitar la p¨¦rdida de sangre.

P. ?Qu¨¦ son los n¨²meros rojos en el banco?

R. Horroroso, lo peor que me puede pasar.

P. Si un d¨ªa se dan toros en Nueva York, ?qu¨¦ habr¨¢ ocurrido?

R. ?Qu¨¦ satisfacci¨®n!, en Nueva York y en el mundo entero.

P. ?Est¨¢ medianamente contento de su vida?

R. Estoy muy contento; he hecho m¨¢s o menos lo que he querido.

P. ?Ha hecho su faena so?ada?

R. No, ni creo que la haga. La sigo so?ando siempre.

P. Este domingo se vota a los pol¨ªticos: ?existen tambi¨¦n toros de derechas e izquierdas?

R. S¨ª, porque unos embisten por el lado derecho y otros por el lado izquierdo.

P. ?Qu¨¦ o qui¨¦n ha sido el amor de su vida?

R. Varias mujeres, porrazones diferentes.

P. ?Hay algo m¨¢s bello que ser torero?

R. Para m¨ª, no.

P. ?Tiene alguna idea de qui¨¦n fue san Isidro?

R. S¨ª, un labrador.

P. Antonio Chenel, ?sue?a a¨²n con el toro?

R. S¨ª, todas las noches.