Los "caddies" de Cruyff

"?Usted cree que Laudrup tiene motivos para sentirse rabioso por el trato recibido en el Camp Nou?". La pregunta no sorprende a Johan Cruyff. La ha o¨ªdo decenas de veces desde el s¨¢bado. Quiz¨¢ por ello dispara de forma intimidatoria para reconducir la conversaci¨®n: "La herida de Laudrup puede durar d¨ªas, pero hay otras que perduran toda la vida, y ¨¦sas son las que me interesan".Cruyff s¨®lo quiere hablar de su fundaci¨®n ben¨¦fica, y para ello, nada mejor que invitar a "todo el mundo que pinta algo como ¨¦l dice, a una cena en Port Aventura, el parque tem¨¢tico de Tarragona, y al d¨ªa siguiente (ayer), a un torneo de golf en el club Bonmont.

Y all¨ª, al pie del Drag¨®n Khan y de los 18 hoyos de un campo de golf, el t¨¦cnico del Barcelona evidenci¨® su ascendente y reuni¨® a figuras tan legendarias como Franz Beckenbauer, el hombre fuerte del Bayern M¨²nich, y Bobby Charlton, el fact¨®tum del Manchester United (entre los tres suman 3 mundiales, 7 copas de Europa, 25 ligas y 6 balones de oro); a t¨¦cnicos como John Benjamin Toshack y Leo Beenhakker; a los mejores especialistas mundiales de otros deportes, como Carlos Sainz, bicampe¨®n de rallies, y a jugadores como Unzu¨¦.

Nada mejor que un auditorio selecto para sensibilizar a la opini¨®n p¨²blica para que colabore en la recaudaci¨®n de fondos destinados a que los discapacitados f¨ªsicos y ps¨ªquicos puedan practicar el deporte. "La ayuda puede ir desde la compra de una silla de ruedas a la construcci¨®n de una pista de atletismo". M¨¢s all¨¢ de sus rencillas dom¨¦sticas, Cruyff sigue siendo Cruyff, y la fundaci¨®n tuvo una presentaci¨®n acorde con el firmante de la convocatoria, pese a las significadas ausencias, como la de Van Basten.

Los coleccionistas de aut¨®grafos soportaron estoicamente un d¨ªa desapacible para reunir la firma de tan ilustres invitados. "Si ya resulta que no sabes jugar mucho, s¨®lo falta que solo falta el viento", se lamentaba Sainz. "El campo tambi¨¦n es un handicap, y nunca mejor dicho", dec¨ªa Koeman. "Ginola no lo hace mal", reiteraba Cruyff. Y es que Cruyff, listo corno nadie, se mont¨® la partida al lado de Ginola, uno de los candidatos a fichar por el Bar?a. "Somos amigos", precis¨® el entrenador, "y si hubi¨¦ramos querido hablar de negocios no jugar¨ªamos al golf".

La charla de Cruyff y Ginola tuvo m¨¢s adeptos que todos los intentos de P¨¦rez Sala por emular el chip de Ballesteros, o el inter¨¦s de Sito Pons por jugar con los hierros cortos, como Olaz¨¢bal, o la reiteraci¨®n de Bobby Charlton por copiar el putt de Nick Price. Los espectadores comprobaron que Ginola gan¨® la partida a Cruyff, pero el t¨¦cnico sentenci¨®: "Hemos montado el torneo de tal manera que favorezca a los malos".

Y se qued¨® tan pancho mientras sus compa?eros asum¨ªan el papel de caddies. La jerarqu¨ªa del t¨¦cnico es tan indiscutible que no le ha faltado ni el respaldo institucional en su proyecto. Marta Ferrusola, esposa del presidente de la Generalitat, presidi¨® la cena de inauguraci¨®n, en la que se regal¨® a los asistentes una litograf¨ªa de Cayetano de Arquer Buigas con un sobre adjunto en el que se invitaba a la donaci¨®n con la advertencia, eso s¨ª, de que desgravaba.