Referendos italianos

EL PR?XIMO domingo se celebran en Italia 12 referendos sobre temas muy diversos. Esa acumulaci¨®n en un solo d¨ªa es en s¨ª discutible, porque puede engendrar confusi¨®n. Pero tres de las consulta ser¨¢n decisivas para el futuro pol¨ªtico de Italia: las que tienden a limitar la abrumadora hegemon¨ªa de la que goza Berlusconi sobre gran parte de la televisi¨®n. Si el resultado de estas consultas es afirmativo, el antiguo jefe de Gobierno deber¨¢ renunciar a su propiedad sobre dos de las tres cadenas que actualmente controla. La campa?a al respecto es virulenta. Berlusconi se presenta como v¨ªctima de un ataque contra la propiedad privada y sus televisiones han desplegado una campa?a permanente para pedir el no.Cuando Berlusconi lleg¨® a la jefatura del Gobierno, despu¨¦s de las elecciones del a?o pasado, era previsible que no tardar¨ªa en estallar la contradicci¨®n entre el ejercicio democr¨¢tico de la direcci¨®n del Gobierno y la propiedad de un gran imperio financiero con omnipresencia en los medios de comunicaci¨®n, y especialmente en la televisi¨®n. La contradicci¨®n ha quedado meridianamente clara ahora, cuando su mantenimiento es objeto de consulta popular. Las cadenas de Berlusconi han practicado una agitaci¨®n desenfrenada contra las opciones adversas en los referendos. El Garante para los temas de publicidad, una especie de Defensor del Pueblo especializado, ha exigido que esas cadenas den a conocer gratuitamente los textos de los partidos favorables al s¨ª para compensar la campa?a masiva y unilateral que han realizado. Pero el poder de los medios de Berlusconi para evitar la divulgaci¨®n de los argumentos contra sus propios intereses es inmenso y esa decisi¨®n no se ha cumplido.

Forza Italia naci¨® en principio para poner fin al viejo sistema de partidos hundidos en sus propias corrupciones. Lejos de ser espejo de pureza, cada vez son m¨¢s claras las corrupciones de las que Berlusconi forma parte. Hace una semana fue detenido su mano derecha, Marcello Dell'Utri, administrador de Publitalia, la empresa que gestiona la publicidad de las televisiones del Cavaliere.Su detenci¨®n aumenta el aislamiento de Berlusconi. Pero millones de italianos lo ignoran debido a las versiones manipuladas de los hechos que difunden las televisiones del Cavaliere. Ir¨¢n a las urnas sin un m¨ªnimo conocimiento de las diversas opciones en juego.Si ganase el no y continuase, por tanto, el actual sistema de cuasimonopolio televisivo de Berlusconi, ¨¦ste podr¨ªa lanzar una ofensiva para forzar elecciones lo antes posible. No puede excluirse que lograra una victoria que le permitiera posponer ad calendas graecas las medidas encaminadas a restablecer el pluralismo en el poderoso mundo audiovisual y cierta igualdad entre los partidos en contienda.