La cantera resuelve en Vigo

El Madrid comenz¨® su postemporada en Vigo con un partido de escasa tensi¨®n y muchas caras poco habituales en el once inicial. Por el pasillo que los jugadores del Celta realizaron a los campeones, pasaron algunos de los hombres clave del t¨ªtulo madridista -Zamorano, Quique y Amavisca-, pero tambi¨¦n lo hicieron otros que todav¨ªa no hab¨ªan debutado en la Liga, como Ca?izares y Nando. Aunque el Celta se jugaba m¨¢s porque necesitaba alg¨²n punto para asegurar la salvaci¨®n, acab¨® contagi¨¢ndose de la escasa ambici¨®n de su rival y se olvid¨® de la agresividad que le ha llevado a completar una temporada m¨¢s que estimable, ante las expectativas que se presentaban a principios de temporada. Al final pag¨® su conformismo con una derrota que compromete ligeramente su situaci¨®n.

Valdano podr¨¢ sacar algunas conclusiones interesantes del ensayo. El t¨¦cnico madridista ya demostr¨® que no tiene reparos en rectificar cuando se equivoca con alg¨²n jugador, como le sucedi¨® con Zamorano y Amavisca, que se ganaron la titularidad en la pretemporada. El Madrid de circunstancias que jug¨® ayer careci¨® de la brillantez que demostr¨® en algunos momentos de la temporada, pero volvi¨® a exhibir la seriedad que le ha llevado a ganar muchos partidos. Su mayor calidad le llev¨® a solventar el compromiso con dos contraataques fulgurantes en los ¨²ltimos minutos. Aun as¨ª qued¨® claro que se necesitar¨¢n algunas aportaciones de calidad, como ya ha reclamado Valdano, para volver a infundir respeto en Europa.

El intento de colocar a Alfonso como interior derecho no tuvo demasiado ¨¦xito, aunque la indudable calidad del jugador no hace descartables otras tentativas. El aspecto m¨¢s positivo de la prueba fue la actuaci¨®n de Sandro, que se mostr¨® como un sustituto de garant¨ªa para Laudrup. No juega como el dan¨¦s, pero aporta toque y calidad al medio campo. La marcha de Mart¨ªn V¨¢zquez no debe preocupar demasiado a Valdano. Otra buena noticia para el t¨¦cnico fue que los dos goles llevaron la marca de la juventud de Rivera y Ra¨²l, ambos de s¨®lo 17 a?os.

El partido acab¨® siendo una fotocopia de la trayectoria exitosa del Madrid. Comenz¨® en plan dominador e imponiendo su mayor calidad, pero le falt¨® concretar sus oportunidades. Luego acus¨® la falta de gasolina, pero no encontr¨® un rival que supiese ponerle en apuros. Al final se impuso con su arma preferida: el contragolpe.