"El uso de la Fuerza de Intervenci¨®n R¨¢pida s¨®lo puede ser excepcional"

Samuel Pellicer Berg¨®s, 52 a?os, es el jefe de los 1.400 cascos azules de la Agrupaci¨®n Galicia, el sexto contingente espa?ol enviado a la antigua Yugoslavia. Como sus antecesores, dedica buena parte de sus esfuerzos a mantener un precario equilibrio entre los tres bandos presentes en la zona de Mostar (musulmanes, croatas y serbios). Al otro lado del hilo telef¨®nico, en su cuartel general de Medjugorje, un ruido seco interrumpe la conversaci¨®n con EL PA?S. "Ha sido una r¨¢faga de Kal¨¢shnikov", explica al cabo de unos segundos. "Est¨¢n de boda".

Pregunta. Tras los bombardeos de la OTAN, la situaci¨®n se ha deteriorado en toda Bosnia, y tambi¨¦n en la zona bajo responsabilidad espa?ola.

Respuesta. Eso es cierto, pero no me atrever¨ªa a decir que hay una relaci¨®n causa-efecto entre los bombardeos y el aumento del n¨²mero de explosiones, que desde luego ha sido ligero. M¨¢s bien lo relaciono con los combates en la l¨ªnea de confrontaci¨®n entre la Armija [el Ej¨¦rcito de mayor¨ªa musulmana] y los serbios. La Armija presiona intentando ganar terreno y los serbios responden. Se trata, no obstante, de enfrentamientos de muy bajo nivel, que no tienen nada que ver con los que se producen en otras zonas de Bosnia.

P. Algunos proyectiles han caido muy cerca del campamento espa?ol.R. Hay que tener en cuenta que, desde las posiciones de tiro de los serbios, la trayectoria pasa cerca del destacamento [de los cascos azules espa?oles] en Mostar este, y cabe la posibilidad de que haya impactos que queden cortos. En alg¨²n caso han ca¨ªdo muy pr¨®ximos. Hubo una explosi¨®n justo al lado, en la que result¨® herido de muerte un civil. Otros impactos se han producido a 100, 200 o 500 metros. Son proyectiles de calibre muy importante y cuando esto se produce nuestra gente se mete en los refugios. De todas formas, durante las ¨²ltimas noches la actividad artillera ha sido muy baja. Tenemos que lamentar el incidente del viernes [cuando el soldado Fernando Caldas fue herido por una granada], pero lo considero un hecho fortuito, fruto de la mala suerte.

P. Alguna explosi¨®n m¨¢s cercana podr¨ªa tener fatales consecuencias.

R. Naturalmente, si hubiera ca¨ªdo m¨¢s cerca, los efectos habr¨ªan sido mucho peores. Es un riesgo importante que tenemos asumido todos los que estamos aqu¨ª. De vez en cuando, atacan la M-17 [la ruta que une la costa con Sarajevo]. El incidente del viernes fue all¨ª. Los serbios nos lo han dicho muy claro: "Sepan ustedes que esa carretera est¨¢ amenazada". ?Qu¨¦ vamos a hacer? No podemos dejar de utilizarla. Es fundamental para la ayuda humanitaria.

P. ?Qu¨¦ medidas ha tomado para mejorar la seguridad del contingente?

R. Hemos reforzado los refugios, mejorando su protecci¨®n, haci¨¦ndolos m¨¢s confortables, metiendo equipos de comunicaciones. Tambi¨¦n hemos restringido en lo posible los movimientos de veh¨ªculos no blindados y hemos suprimido misiones que no son absolutamente necesarias cerca de la l¨ªnea de confrontaci¨®n.

P. ?Ha hablado ¨²ltimamente con los serbios?

R. No. Y lo siento. Tengo ganas de decirles, entre otras cosas, que creo que una granada suya ha herido a uno de mis soldados y que varias han ca¨ªdo junto a nuestro campamento. Ya s¨¦ lo que me van a contestar: que ellos no han sido o no iban contra nosotros.

P. El ministro de Defensa ha anunciado que su contingente se reforzar¨¢ con morteros y misiles contracarro.

R. Hasta donde s¨¦, el refuerzo se producir¨ªa en los t¨¦rminos en que ha dicho el ministro. Se trata de aumentar nuestra potencia de fuego, lo que nos vendr¨¢ bien si nos vemos en la necesidad de utilizarla. Sin embargo, estos nuevos medios, si se decide enviarlos, no supondr¨¢n un cambio cualitativo en nuestra capacidad, que es de mera autoprotecci¨®n. No tenemos ni siquiera verdadera capacidad defensiva, como se concibe en t¨¦rminos convencionales, y desde luego excluimos la ofensiva.

P. ?Qu¨¦ efectos puede tener sobre el terreno la nueva Fuerza de Intervenci¨®n R¨¢pida?

R. S¨®lo conozco esa fuerza por los medios de comunicaci¨®n, a los que aqu¨ª se tiene un acceso limitado. Dadas sus caracter¨ªsticas, evidentemente la utilizaci¨®n de esa fuerza s¨®lo se producir¨ªa en circunstancias verdaderamente graves, en las que habr¨ªa que replantearse nuestra situaci¨®n aqu¨ª, porque se pueden hacer mil conjeturas sobre las repercusiones que su uso tendr¨ªa para los cascos azules. Estoy seguro de que las condiciones puestas por Naciones Unidas har¨¢n que su empleo sea excepcional.