El Villamar¨ªn se rindi¨® a su ¨ªdolo
El beticismo acudi¨® en masa a la despedida del futbolista m¨¢s idolatrado de la historia del club. El Gordo recibi¨® un adi¨®s multitudinario en medio del mejor ambiente. Rafael Gordillo fue agasajado con docenas de regalos de amigos, pe?as e instituciones y fue aclamado como el mejor vistiendo la camiseta del equipo que le permiti¨® demostrar su gloria y contra el que lo contrat¨® despu¨¦s para ponerlo en los altares.
Miles de b¨¦ticos tomaron la Avenida de La Palmera desde temprano y peregrinaron al Villamar¨ªn exhibiendo con orgullo el retrato de Gordillo en banderas, pancartas y camisetas. Despu¨¦s, todo fue ver de y blanco. Gordillo y la UEFA, dos conceptos indivisibles en el ambiente de Hell¨®polis. La reuni¨®n no se qued¨® af¨¢nica de milagro: "Musho Gordo, musho Gordo, eh", "Eurobetis, Eurobetis" fueron los mensajes un¨¢nimes que saludaron la aparici¨®n de Rafael Gordillo casi tina hora antes de que se iniciara el partido de su homenaje. Porque esta hinchada no se cansar¨¢ de festejar la haza?a lograda en el ¨²ltimo a?o de Gordillo: la segunda mejor clasificaci¨®n de toda la historia, la obtenci¨®n del billete para Europa y el haber superado en la tabla al eterno rival.
Y nunca dio la sensaci¨®n de que el Madrid fuera un convidado d¨¦ piedra en esta parafernalia verdiblanca. Bufandas madridistas y b¨¦ticas se confirman en la grada igual que se confunde un extra?o nudo entre ambas afi ciones. Una vinculaci¨®n sin partida de nacimiento concreta, pero que tiene mucho que ver con la presencia de este impresionante futbolista en el Real Madrid. Ayer volvi¨® a mezclarse este ambiente que tantas suspicacias gener¨® el domingo. Despu¨¦s, visto el af¨¢n de Zamorano, se comprob¨® que el Madrid era el enemigo. Ayer no. El Madrid trajo a Sevilla a los mejores amigos de Rafael Gordillo en una despedida alegre, pero triste para el f¨²tbol. Un mito coIg¨® las botas.
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