Crivilil¨¦ y Puig flanquean a Doohan en Assen

?lex Crivill¨¦ y Alberto Puig ya est¨¢n entre los grandes. Aunque el campe¨®n Mick Doohan logr¨® vencerles en el Gran Premio de Holanda, los dos pilotos espa?oles estuvieron sobre el podio celebrando la segunda y la tercera posici¨®n, un ¨¦xito al que sus seguidores ya empiezan a acostumbrarse. Es cierto que se les escap¨® el premio gordo, pero en Assen pelearon por la victoria hasta el ¨²ltimo suspiro frente al n¨²mero uno. Y se batieron entre s¨ª no por ser sexto, sino por vencer, con las c¨¢maras de televisi¨®n pendientes de su duelo, como anta?o s¨®lo hac¨ªan los estadounidenses o los australianos. La pelea particular la gan¨® Crivill¨¦, pero los dos compartieron honores tras una carrera soberbia.

Fue un duelo con sabor casero, pero en juego no estaba s¨®lo ser el mejor espa?ol. Esta vez, derrotar al enemigo pod¨ªa equivaler a ser el mejor de los mejores. Con permiso de Doohan. El australiano era el ¨²nico obst¨¢culo, y acab¨® siendo infranqueable. Pero en el camino, durante 20 vueltas, 41 minutos y 120 kil¨®metros, los dos espa?oles ofrecieron un recital, despertaron ilusiones y anunciaron un futuro esperanzador.Ocurri¨® en Holanda, en la catedral de Assen, frente a 120.000 aficionados llegados de media Europa. Es ¨¦se un circuito talism¨¢n para los espa?oles. As¨ª lo indica la historia: ?ngel Nieto es el piloto que m¨¢s grandes premios ha ganado en Assen (15), all¨ª conquist¨® Crivill¨¦ el primer triunfo en 500 (1992) y hasta ayer el propio ?lex llevaba all¨ª tres podios consecutivos. Por no hablar ya de mera pole position en 500 conquistada por Crivill¨¦.

Tantos antecedentes auguraban un d¨ªa de ¨¦xito. El romance de Crivill¨¦ y Assen vivi¨® un nuevo cap¨ªtulo y s¨®lo la calidad de Doohan impidi¨® una celebraci¨®n a¨²n mayor. Quiz¨¢ tambi¨¦n influy¨® el propio recato del catal¨¢n al no intentar batir a su jefe de filas. Adem¨¢s, un nuevo actor particip¨® esta vez en el baile. Puig se sum¨® a la fiesta; aunque, igual que Crivill¨¦, no acab¨® satisfecho. Los dos terminaron conscientes de que el podio ya no es suficiente. Se saben capacitados para derrotar incluso a Doohan.

La mejor carrera

Y hasta el campe¨®n australiano lo sabe. "?Vaya pelea con los dos espa?oles."!, coment¨®, "los dos son enemigos a los que tener siempre en cuenta".- Qui¨¦n sabe si esa afirmaci¨®n no vale tambi¨¦n para el Mundial, pues los dos espa?oles est¨¢n en el cuarteto de favoritos para el t¨ªtulo, junto con Doohan y el australiano Daryl Beattie.

El Gran Premio de Holanda de 500 fue el m¨¢s emocionante de la temporada. Lo demuestra la diferencia de medio segundo -la m¨¢s peque?a en lo que va de campeonato- que separ¨¦ el pago de los tres primeros bajo la bandera de cuadros. El arranque de la prueba fue un calco de las cuatro anteriores. Puig sali¨® como una bala y se coloc¨® en cabeza. Le siguieron el italiano Loris Capirossi, Doohan y Crivill¨¦, que no aprovech¨® su posici¨®n preferente en la parrilla. Todos ellos con Honda, pues para esta marca tambi¨¦n fue un d¨ªa. grande, al que contribuyeron el mal momento de Yamaha y la ausencia por lesi¨®n de Beattie, el mejor piloto de Suzuki.

Puig impuso enseguida un ritmo muy fuerte, que mantuvo despu¨¦s Capirossi durante cuatro vueltas. Entre los tres latinos impidieron que Doohan se escapara. Y cuando el italiano afloj¨¦, Puig se situ¨® como l¨ªder y tir¨® como un poseso. S¨®lo el australiano y Crivill¨¦ pudieron seguirle. A partir de ah¨ª, los tres rodaron pegados, cada vez m¨¢s r¨¢pidamente. Doohan intent¨® pasar a Puig en cada frenada, y

cada vez el pupilo de Sito Pons le cerr¨® la puerta. As¨ª, durante 12 emocionantes vueltas. Crivili¨¦, mientras, guardaba la espalda a su n¨²mero uno.

La tensi¨®n de la pista se multiplicaba por mil en la zona de talleres. El de Puig, abarrotado, vibraba al ver l¨ªder a supiloto. En el de Crivill¨¦, ocho metros m¨¢s all¨¢, menos gente y m¨¢s calma. Y lleg¨® el momento culminante: a cuatro vueltas del final, Puig no pudo resistir m¨¢s las embestidas de Doohan y el australiano se col¨® en la frenada. Sin embargo, no pudo escaparse, con lo que la resoluci¨®n de la carrera qued¨® aplazada hasta el ¨²ltimo giro.

Entonces, cuando se esperaba el ataque de Puig, fue Crivill¨¦ quien adelant¨® limpiamente a. su amigo y rival. Quedaban pocas curvas y as¨ª fue como termin¨® la carrera. Doohan venci¨® y recuper¨® la primera posici¨®n en el Mundial. Pero fue el d¨ªa de Espa?a en Assen.

Pasado el fragor de la batalla, Crivill¨¦ y Puig compartieron los honores y dos banderas espa?olas flanquearon la australiana en los m¨¢stiles holandeses. Pero los dos pilotos se sintieron derrotados. "Quiz¨¢ hubiera podido ganar", dijo ?lex con la boca peque?a tras marcar incluso la vuelta m¨¢s r¨¢pida de la carrera. El nen de Seva lleva ya cuatro cajones este a?o, y el de ayer fue su me jor resultado en 500 aparte de su victoria en 1992. Adem¨¢s, gan¨® la peque?a lucha que P mantiene con Puig, lucha que ahora domina pues este a?o ha ganado cuatro veces a Alberto. ?ste, no obstante, est¨¢ mejor clasificado en el Mundial -son tercero y cuarto-.

El piloto barcelon¨¦s no estaba muy satisfecho: "A nadie le agrada perder un gran premio que has liderado casi todo el rato, aunque siempre es bueno estar en el podio". Un tipo tan inconformista como ¨¦l esperar¨¢ la. revancha, en Le Mans, dentro de 15 d¨ªas.