"Yo garantizo que los m¨¦todos del Cesid se ajustar¨¢n a la legalidad"

"Es una tira muy simp¨¢tica", comenta sobre el chiste de Peridis publicado el viernes por EL PA?S, en el que le dibujaba con capa, fusil y gorro militar. "Me recuerda otra tira de Peridis de 1984, cuando pas¨¦, de la direcci¨®n de Asuntos Religiosos a la Subsecretar¨ªa de Defensa".["Como especialista en derecho can¨®nico, te nombro subsecretario para la reforma militar. ?Qu¨¦ m¨¦todos piensas aplicar?", le preguntaba la caricatura de Narc¨ªs Serra a la de Su¨¢rez Pertierra. "El tradicional en estos casos: incienso y agua bendita", respond¨ªa.]

No todo fue tan f¨¢cil, sin embargo. Como responsable de la pol¨ªtica de personal, tuvo que adoptar medidas impopulares y destituir a m¨¢s de un general.

"Fueron a?os muy importantes en los que iniciamos procesos de modernizaci¨®n de las Fuerzas Armadas", recuerda ahora, de regreso a su antigua casa. "Siempre intentamos contar con los propios militares. Creo que entendieron que nuestro objetivo era incardinar a los ej¨¦rcitos en la sociedad espa?ola y prepararlos para los acontecimientos que se han producido en el mundo".

Pregunta. Usted es el tercer ministro de Defensa del PSOE. ?Qu¨¦ siente sabiendo que sus dos antecesores han dimitido?

Respuesta. En mi toma de posesi¨®n dije que Serra y Garc¨ªa Vargas hab¨ªan realizado un acto de coraje pol¨ªtico. Lo sigo pensando. Yo trabaj¨¦ con ambos y puedo certificar que son dos personas de gran solidez pol¨ªtica y extraordinariamente honestas.

Estatuto del servicio secreto

P. Su primera decisi¨®n ha sido nombrar la nueva direcci¨®n del Cesid. ?Por qu¨¦ dos responsables? ?Por qu¨¦ dos militares?

R. Empezar¨¦ por lo ¨²ltimo. Lo importante no es que sean militares o civiles, sino personas id¨®neas y con una exquisita lealtad al sistema constitucional. ?se es el perfil que he propuesto al Consejo de Ministros. ?Por qu¨¦ dos personas? El Cesid ha crecido extraordinariamente, sus misiones se han ampliado mucho y, adem¨¢s, hay que tender hacia una nueva organizaci¨®n que evite que se repitan circunstancias como las que se han producido. Creo que hay trabajo para dos personas y que he encontrado a un director general y a un secretario general que se complementan y se compenetran muy bien.

P. Supongo que en el mundo civil tambi¨¦n hay gente id¨®nea.

R. No hay ninguna raz¨®n especial para que sean militares, como prueba el que sus or¨ªgenes son muy distintos.

P. El Gobierno ha anunciado una profunda reforma del Cesid. ?En qu¨¦ va a consistir?

R. El primer paso ser¨¢ el Estatuto del Personal, en el que se trabaja desde hace tiempo. Ya lo estoy estudiando y me gustar¨ªa, si fuera posible, llevarlo al pr¨®ximo Consejo de Ministros. El Estatuto pretende dotar de un r¨¦gimen ¨²nico y espec¨ªfico a todo el personal del Cesid, sin distinguir la condici¨®n militar o civil de sus miembros. Afecta al sistema de ingreso, a la formaci¨®n, al desarrollo de la carrera profesional, al r¨¦gimen disciplinario y tambi¨¦n a los derechos y deberes.

P. ?Qu¨¦ ha ocurrido en el Cesid? ?C¨®mo ha sido posible?

R. Se produjo un exceso de confianza en algunas personas y una quiebra de la misma. Eso dio lugar a que se realizaran escuchas ilegales, se sustrajeran documentos y se difundieran.

P. El presidente del Gobierno asegur¨® en el Congreso que ¨¦l recib¨ªa la informaci¨®n del Cesid, pero no conoc¨ªa sus m¨¦todos. ?Qui¨¦n garantiza que esos m¨¦todos se ajustan a la legalidad?

R. El Cesid ha de actuar en el marco de la m¨¢s estricta legalidad. Es obligaci¨®n de los nuevos responsables del centro y del ministro de Defensa garantizar que esa actuaci¨®n se realiza de acuerdo con la ley. Hay que establecer controles que impidan que una quiebra de confianza pueda repetirse en el futuro. Yo estar¨¦ muy gustoso de informar peri¨®dicamente a la Comisi¨®n de Secretos Oficiales del Congreso de las actividades del servicio.

P. Por tanto, asume usted la responsabilidad de lo que pase.

R. Por supuesto, intentar¨¦ por todos los medios que la actuaci¨®n del Cesid, como creo que en t¨¦rminos generales ocurre, se ajuste a la m¨¢s estricta legalidad.

P. Se dice, sin embargo, que los servicios secretos act¨²an, por su propia naturaleza, al borde de la ley.

R. Un servicio de inteligencia tiene que recabar informaci¨®n de inter¨¦s para la seguridad y la defensa nacional, pero no puede realizar acciones ilegales, como la grabaci¨®n de conversaciones que puedan afectar a derechos individuales sin la correspondiente autorizaci¨®n. Quiz¨¢ haya que adaptar la legalidad no tanto a la actividad de estos servicios como a la r¨¢pida aparici¨®n de medios t¨¦cnicos, por ejemplo, en materia de telecomunicaciones.

P. ?Puede asegurar que ya no se realizan escuchas como las que han salido a la luz?

R. En este momento no se est¨¢n realizando grabaciones que vulneren derechos de las personas.

P. El PP se neg¨® a consensuar el nombramiento de la nueva direcci¨®n del Cesid.

R. Yo espero que los nuevos responsables del Cesid sean bien aceptados por los grupos pol¨ªticos. Nombrarlos es una responsabilidad del Gobierno, pero entiendo que el trabajo en instituciones b¨¢sicas del Estado no debe estar sometido a los vaivenes de la vida pol¨ªtica, aunque s¨ª a todos los controles que sean necesarios. Mi voluntad es recabar la colaboraci¨®n y apoyo de los grupos pol¨ªticos para que el Cesid responda a las misiones que tiene legalmente encomendadas.

P. Tras los nombramientos en el Cesid, su segunda prioridad, seg¨²n anunci¨®, son las tropas espa?olas en Bosnia.

R. Tengo mucho inter¨¦s en llevarles un mensaje de ¨¢nimo de parte del Gobierno y de toda la sociedad, pero tambi¨¦n quiero comprobar la situaci¨®n sobre el terreno, y espero visitarles antes de que acabe julio. Aunque la situaci¨®n en nuestra zona es de calma, la actual escalada b¨¦lica no facilita el avance de las conversaciones de paz ni el desarrollo de las misiones de ayuda humanitaria. Aun as¨ª, no es posible una retirada unilateral sin el concurso de los pa¨ªses que est¨¢n trabajando bajo bandera de la ONU en la antigua Yugoslavia. Mi posici¨®n es que, mientras sea posible continuar la ayuda humanitaria, debemos permanecer all¨ª.

P. El Congreso acaba de aprobar el nuevo C¨®digo Penal, que reduce la pena de c¨¢rcel para los insumisos hasta hacerla pr¨¢cticamente inaplicable.

R. No creo que sea as¨ª. El nuevo r¨¦gimen penal prev¨¦ justamente una capacidad de aplicaci¨®n de las penas por parte de los jueces muy importante. Yo espero que el nuevo sistema no afecte al buen desarrollo del servicio militar, que debe prestigiarse con mejoras en la calidad de vida e los soldados.

P. No me dice si prefiere la prisi¨®n o la inhabilitaci¨®n como castigo para los insumisos...

R. Yo soy solidario con el proyecto que envi¨® el Gobierno y, por supuesto, acato la decisi¨®n soberana del Parlamento.

Prestaci¨®n de los objetores

P. En v¨ªsperas de las elecciones municipales, el presidente se comprometi¨® ante el Consejo de la Juventud a estudiar la igualaci¨®n del servicio militar y la prestaci¨®n de los objetores.

R. Hay que estudiarlo muy detenidamente, pero me parece bastante claro que para equiparar la duraci¨®n de ambos servicios habr¨ªa que avanzar todav¨ªa m¨¢s en el sistema de cumplimiento de la prestaci¨®n sustitutoria. En algunos casos, como el de los objetores que colaboraron en la atenci¨®n a los refugiados en Bosnia-Herzegovina, esta equiparaci¨®n ya se ha producido.

P. Los presupuestos de 1996 van a ser muy duros, tambi¨¦n para Defensa, que ya ha padecido numerosos recortes.

R. En este momento, necesitamos de manera imperiosa reducir el d¨¦ficit p¨²blico para poder desarrollar pol¨ªticas que tengan resultados sobre el principal problema de Espa?a: el desempleo. Todas las pol¨ªticas sectoriales deben acomodarse a ese objetivo. Dicho esto, creo que las Fuerzas Armadas necesitan un presupuesto importante, al menos por dos razones. Para afrontar los crecientes compromisos internacionales y, tambi¨¦n, porque sus inversiones tienen una gran incidencia en la industria. As¨ª lo voy a poner de manifiesto en el debate presupuestario.

P. Desde el 1 de julio, Espa?a preside la Uni¨®n Europea, pero tambi¨¦n la Uni¨®n Europea Occidental (UEO). ?Cu¨¢les son sus prioridades?.

R. Fundamentalmente dos. La primera es convertir la UEO en una organizaci¨®n m¨¢s ligada a la Uni¨®n Europea, como pilar europeo de la defensa, y ya se est¨¢ trabajando para ofrecer opciones en esta l¨ªnea a la conferencia intergubernamental de 1996. Adem¨¢s, esperamos concluir durante nuestra presidencia el Libro Blanco de la Defensa Europea, que ser¨¢ un documente muy importante.

P. A los tres d¨ªas de que usted tomase posesi¨®n, Felipe Gonz¨¢lez admiti¨® la posibilidad de anticipar las elecciones. ?No le parece que es mejor que no deshaga las maletas?

R. No. Me parece que la sensaci¨®n de provisionalidad es muy mala para las responsabilidades p¨²blicas. La obligaci¨®n de cualquier ministro es trabajar con e horizonte de toda la legislatura.